martes, 8 de abril de 2008

"RACIONAL" O "IRRACIONAL" (I)

En los próximos meses me propongo dedicar un buen puñado de capítulos a vuestra relación con la del resto de animales. Espero demostrar a lo largo de no menos de 20 posts lo odiosamente miserables que podéis llegar a ser con ellos.

Cuando os expresáis con frases del estilo de “…el hombre y los animales” o “…los animales son” en lugar de decir “los animales somos”, mostráis vuestra condición de antropocentristas o lo que es peor, de especistas.
Demostráis también una ignorancia supina de lo que es el reino animal.
Al hablar así evidenciáis que para vosotros el hombre no es un animal, que sois cosa aparte… y que por supuesto sois superiores.
Vuestro chauvinismo de especie me hace pensar de manera nítida en los nazis de triste recuerdo histórico.
Os emplazo a que encontréis a un solo humano que no haga diferencias con los demás animales en sus expresiones cotidianas al referirse a ellos.
Os costará mucho encontrar alguno… ¡¡en meses !!.
Todos caen en el mismo error, incluso vuestros profesores universitarios de las Facultades de Biología y, lo que es aún peor, utilizan estas vergonzantes expresiones incluso las diversas asociaciones ecologistas, protectoras de animales no humanos, asociaciones pro derechos del animal no humano, etc.

Y es que vuestra ignorancia sólo es comparable a vuestra soberbia.

La Naturaleza se encarga en multitud de ocasiones de moveros el pedestal en el que estáis encaramados.

De cuando en cuando nacen humanos con caracteres atávicos que nos sirven de evidencia evolutiva y os ponen en vuestro sitio.
La aparición en el animal humano de caracteres atávicos simiescos, constituye una prueba irrefutable del papel desempeñado por los reajustes cromosómicos durante la hominización.
Entre estos caracteres destaca la aparición de niños con cola, el hirsutismo (exceso de vello que aparece en ciertos humanos y que se distribuye sobre su cuerpo de la misma manera que lo hace sobre el cuerpo de un chimpancé), los pliegues palmarios típicos de la trisomía 21 que recuerdan los de los monos, el llamado "tubérculo de Darwin" en el pabellón de la oreja (hallado también en la mayoría de los monos cercopitecidos) la soldadura entre el segundo y tercer artejo (cigodactilia) que se encuentra en los gibones de Sumatra, los diversos grados de disminu­ción del psiquismo, la aparición de una larga hilera de pezones sobre la “línea de la leche” (al estilo de las perras) en algunas hembras humanas, la presencia de músculos horripiladores en todos los seres humanos idéntica a la del chimpancé y bonobo, la presencia en humanos de un músculo atrofiado que en un pasado permitía el movimiento del pabellón auricular, etc.

El hombre presenta más de cien estructuras vestigiales que nos sirven para "delatar" algunas características de sus ancestros.
Cada una de estas estructuras es una cura de humildad para su crecido ego.

En algunos genes se observan diferencias mayores entre dos hombres que entre un hombre y un chimpancé.

Recordad que vuestro ADN se diferencia sólo en un 1.6% del ADN del bonobo y del chimpancé, con el gorila la diferencia es del 2.3%.
Precisamente por ello, después del chimpancé, el pariente más próximo a nosotros, los bonobos, no es el gorila sino ¡¡vosotros!!. El gorila nos queda más lejos.

Para genes concretos, algunos humanos están más cerca de algunos chimpancés o bonobos que de otros humanos.

Según muchos científicos entre los que destaca Jared Diamond, la diferencia genética entre homínidos es menor que la que existe entre otras especies de animales que pertenecen al mismo género.
Vuestro antropocentrismo y especismo evitan que, contra toda lógica científica, bonobos y chimpancés no estén aun en vuestro género.
El chimpancé debería llamarse ya Homo troglodytes y el bonobo Homo paniscus.

Sois, por desgracia, tan parecidos a nosotros que incluso los ritmos del sueño parecen calcados.

Los electroencefalogramas de los primates adultos (hombre incluido) muestran dos actividades que son comunes a todos ellos: el llamado "ritmo alfa", relacionado con el sentido de la vista, y que no se presenta en los animales que tienen los ojos cerrados; y el ritmo somatomotor de inmovilidad, que sólo aparece cuando el sujeto está completamente inmóvil, y que en un principio se creía que era únicamente propio del ser humano,...hasta que se descubrió que lo compartía con chimpancés, macacos, etc.

Si efectuamos a diversos primates (sin olvidar al hombre) un electroencefalograma de su período de sueño, veremos que todos ellos presentan la misma organización gráfica, con cinco fases muy claramente diferenciadas:

La fase I, que corresponde al período de somnolencia, durante el cual aparece el ritmo alfa en el momento de cerrar los ojos; se amplifica primero y des­pués desaparece.
La fase II, de sueño ligero, caracterizada por ondas sigma.
La fase III, de sueño medio, en el transcurso de la cual unas ondas lentas (llamadas delta) aparecen en el intervalo de los elementos transitorios.
La fase IV, de sueño profundo, en la que las ondas delta son continuas.
Y la fase V, llamada paradoxal, caracterizada por la desaparición de ondas delta y de elementos transitorios, con una actividad eléctrica relativamente rápida, parecida a la del sujeto despierto con los ojos abiertos.
Durante esta fase se dan numerosos movimientos oculares rápidos (fase REM) y una disminución del tono muscular postural.
La fase REM, ligada a los sueños, no solamente se presenta en los primates sino también en otros mamíferos entre los que se encuentra el perro, el gato, el ratón, etc.
El lector que tenga en su casa estos animales podrá observar con facilidad en ellos esta fase de sueño en la que los globos oculares se mueven por debajo de los párpados con mucha rapidez.
Ello significa que el animal esta soñando, y por lo tanto que es poseedor de una "vida psíquica".
Como veis “el poder soñar” no es una característica exclusivamente humana… ni en eso sois diferentes.


Os he oído en ocasiones hablar de los “animales de compañía”. Cuando usáis esta expresión os referís a perros, gatos y mascotas en general. En ningún momento atináis a pensar que vuestra madre, vuestro padre, abuelo, abuela, hermanos y pareja, es decir, los humanos que comparten vivienda con vosotros, son también animales domésticos y animales de compañía. Y, evidentemente, son “animales de compañía” porque son animales y os hacen compañía.

Es interesante haceros notar que de entre los animales que conviven con vosotros (padre, madre, perro, hermanos, etc.) sólo uno de ellos os espera frente a la puerta cuando llegáis y os muestra día a día a lo largo de toda su vida la alegría que le produce vuestra llegada al hogar.
Por supuesto que no será ninguno de vuestros padres o hermanos, ni siquiera vuestra pareja, será… ¡¡ vuestro perro !!.
Precisamente el único que no pertenece a vuestra especie (afortunadamente), y el único que no os fallará nunca y os demostrará amor y fidelidad hasta el fin de sus días.
Ciertamente no esperéis lo mismo de los demás… aunque lleven vuestra propia sangre.
Así es vuestra especie.

Nosotros nos hemos preguntado muchas veces que es lo que os hace creer que sois tan superiores y no atinamos con la respuesta, ya que conocemos muchísimas especies animales que os superan en muchas cosas.
Algunos os superan en fuerza, otros son más veloces, más resistentes, o pueden hibernar en épocas de escasez, o son capaces de percibir los rayos infrarrojos o los ultrasonidos, o tienen mejor vista y un sentido del olfato infinitamente superior al vuestro. Y, por supuesto, muchos de ellos se nos antojan bastante más inteligentes que vosotros.

La cosa se agrava al considerar que, a parte de ser TODOS especistas, muchos de vosotros sois además racistas y sexistas.

Siempre me llamó la atención el notar que cuando os entregan formularios para que los rellenéis al hacer cualquier solicitud oficial (requisito previo propio de vuestra doma social) hay un apartado al principio del documento en el que debéis escoger las opciones “varón” o “hembra”.
Nosotros nos preguntamos lo siguiente: Si una alternativa es “hembra” ¿por qué narices la otra no es “macho”? … y ¿qué diantre es eso de “varón”?.
Este es uno de los múltiples detalles que os identifican como animales sexistas.

Tampoco nos explicamos porque muchos de vosotros os consideráis superiores por el hecho de tener menos melanina que vuestros congéneres de raza negra. ¿A santo de qué os hace superiores el tener esta deficiencia?
Para nosotros sólo sois monos descoloridos, os falta el color del que disfrutan otros.
Al tener este problema melánico sufrís más que ellos a pleno sol y sois víctimas propiciatorias del cáncer de piel, especialmente con el cambio climático en el que estamos inmersos y que vosotros mismos habéis provocado.

Los humanos que ante el alud de evidencias científicas optáis (muy a pesar vuestro) por admitir que sois animales, os definís como “animales racionales”.
Con ello pretendéis remarcar que vosotros sois animales con raciocinio o sea “animales pensantes” mientras que para vosotros, los demás animales carecen de esta virtud.
Una vez más os equivocáis y, una vez más, se os ve el “plumero”.

Cuando a un mono le colgáis un plátano del techo de una habitación y el mono no llega a cogerlo, buscará por la habitación hasta encontrar una silla, la cual arrastrará hasta llegar a colocarla debajo mismo del plátano. Acto seguido se subirá en ella y si aún no alcanza el fruto, se bajará y buscará hasta encontrar un palo que manejará subido a la silla y que le permitirá golpear al plátano hasta hacerlo caer.
El mono tiene un problema y lo resuelve con éxito, para ello ha tenido que razonar… y si razona ¡¡ ES RACIONAL !!.

Como veis hay más animales racionales, de hecho lo son todos los que son capaces de resolver los problemas cotidianos razonando.

Y ahora os voy a poner en un nuevo aprieto. Suponed que vuestro padre tiene una enfermedad degenerativa grave irreversible y está ingresado en un hospital sin capacidad para conocer y reconocer. ¿Qué dirías? Que sigue siendo un animal racional o que "era" un animal racional.
¿Lo considerareis ahora un “animal irracional”? No, ¿verdad?.
Pues ahí lo tenéis… para vosotros vuestro padre seguiría siendo un “animal racional” dentro de su irracionalidad.
Lo único que os importa es que sea humano
, seguirá siendo para vosotros racional aunque no pueda resolver los problemas que resolvería una hormiga, a la que, por otra parte tildareis de irracional.

En fin, sois así y no tenéis cura.


Que la Naturaleza se apiade de vosotros.

2 comentarios:

Keve dijo...

Hola Ringo, te olvidastes el "Que la sensatez del bonobo os acompañe…".
Estas verdaderamente documentado, y entremedio de las palabras se ve algo que no se si es : Odio o asco. Como mono domestico, yo tb siento eso a veces, pero intentando educar, corres el riesgo de convertirte en lo que mas odias. Es tu web y tu "experimento" o "investigación". Al = que dices que los animales (entre los que estan los humanos), creo tienen realidades "ilogicas" para nuestra realidad, por suerte o desgracia me tope con gente "lobotomizada", y tienen un curioso mundo, distinto pero "conscientes" en una realidad. Se trataba de gente de accidentes, no tratada con bisturi. Con esto no me refiero a alma, no creo que un ser tenga alma, pero si pecepción e interpretacion. Te recomiendo la pelicula: Joni cojió su fusil
donde se da una idea, sobre que es racional y que no lo es, o el punto de vista del autoestopista galactico no es una gran pelicula, pero el gran ordenador, y un mundo donde las ratas son la gran especie, invita a pensar. Probablemente ya las habias visto. En cualkier caso, creo ke lo ke nos distinge como especies (entes), incluso en cada raza y cada sujeto, son las necesidades, a una ameba no le sirve de nada saber pensar esto, a mi si, ni ella es tonta ni yo superior, nos diferencia la necesidad. Al = ke los humanos no tienen la necesidad de sentirse =les a los animales, y tu o yo, si :), no x gusto, si no porque nos gusta entender otras realidades.
PD:Una hormiga por si sola, apenas piensa, es como un ordenador, entiende cosas muy sencillas, pero junto con mas hormigas crea cosas complejas, la robotica es muy interesante, cuidate y hasta la semana que viene Ringo.

RINGO MAKUMBA dijo...

Hola de nuevo Keve.

Dices que no sabes si siento odio o asco… ¿y por qué no ambas cosas?
Tú, que eres humano, confiesas sentir a veces odio y asco, pues… imagínate nosotros.

Si quemáis nuestros bosques, coméis nuestras carnes, nos torturáis en laboratorios inoculándonos vuestras enfermedades, polucionáis o secáis los ríos en los que bebemos, cortáis nuestros árboles y encima nos jodéis nuestro clima... ¿Qué esperáis? ¿Qué os amemos?

Sí, he visto “Jhony cogió su fusil”… yo por mi parte te recomiendo que veas vuestra película “Hombres salvajes, bestias salvajes” (I + II).

Celebro que a ti te sirva saber pensar, pero por lo que veo a la humanidad le ha servido de bien poco y a nosotros, desde que la humanidad piensa nos ha ido bastante peor.
Mejor será que dejéis de “pensar”, créeme… no sea que la liemos aun más.

Que la sensatez del bonobo te acompañe.