lunes, 26 de mayo de 2008

RECORTES DE PRENSA

Desde que he llegado a Europa tengo la costumbre de leer la prensa para enterarme de las hazañas diarias de vuestra especie. No suelo entretenerme demasiado en vuestra manera de hacer política porque casi todo huele a excremento, en cambio, suelo prestar más atención a vuestro comportamiento social, aunque bien es verdad que uno debe contener sus nauseas en multitud de ocasiones.

Me llama la atención el afán de protagonismo de la Iglesia católica y el del cada vez más influyente Islam, para tratar de controlar y dirigir vuestro comportamiento según su dictado.

En un par de días han aparecido en vuestros periódicos algunos artículos que me han interesado por varias razones, a saber:

1) Me confirman los desesperados intentos de la Iglesia Católica para dominar vuestras mentes hasta el punto de llegar a convenceros de que debéis actuar contranatura.

2) Me demuestran hasta que punto estáis domesticados por las doctrinas políticas y religiosas.

3) Me reaseguran en mi idea de que no sois racionales con vuestros dioses.

4) Me confirman la enfermiza obsesión del Papa, obispos y curas por el SEXO.

5) Me reafirman en mi sospecha de su permanente interés en aterrorizaros con mentiras e historias sobre fantasmas, espíritus demonios e infiernos.

6) Me demuestran su ausencia total del sentido del ridículo, hasta el punto que creo que a algunos de ellos deberían ser declarados “clínicamente muertos” por su evidente encefalograma plano.

El primer artículo que ha llamado mi atención es de uno de los brujos de la tribu, un tal José Antonio Fortea, que se autocalifica como “EXORCISTA MAYOR DE ESPAÑA”.
Como cualquier otro brujo, asegura que esta especializado en expulsar a los malos espíritus.
Como veis fantasía no le falta.
Afirma que el demonio y el infierno existen. Como es habitual, necesita aterrorizar al personal (como cualquier otro cura) para después haceros creer que solo él os puede librar del mal. Eso le da autoridad y….sustento.

Como nadie ha visto nunca al sujeto de sus fantasías, sale del apuro afirmando que el diablo es invisible, ya que es un espíritu,… y empieza una nueva historia de fantasmas y mentiras.

Luego nos habla del hábitat donde se encuentran a sus anchas los demonios: ”donde hay pecado”

A continuación, el curioso personaje nos ofrece su receta contra los demonios, muy metido en su papel de curandero-boticario.

RECETA CONTRA EL DIABLO:

- Leer de 3 a 5 minutos al día el Evangelio o la Biblia, (se le olvida mencionar si se debe hacer antes o después de las comidas) y naturalmente deberá reiterarse el “tratamiento” durante toda la vida, como si de una enfermedad crónica se tratase.
- Ir a misa los domingos.
- Confesarse si se peca.

Sobre el primer punto el brujo insiste en que sobre todo se extreme la precaución durante las dos o tres primeras semanas después de la expulsión diabólica porque es durante estas semanas cuando el diablo insiste en entrar de nuevo en el cuerpo de su víctima.

En cuanto al detalle de la lectura diaria de la Biblia, me gustaría haceros una pregunta:
Dado que os recomienda 180 segundos para leer la Biblia… ¿Cuántas líneas creéis vosotros que se pueden leer en 180 segundos, más allá del título…?
¿Qué opináis de su estado mental?... Yo ya me he hecho una idea ¡¡¡

También prohíbe acudir a la competencia (al santero) ya que dice que “la magia blanca y los conjuros atraen al diablo”.
El pobre no se da cuenta de que él también practica la magia al transformar vino en sangre y trigo en carne durante la misa.
En cuanto al “color” de su magia, tengo mis dudas… en lugar de blanca, bien pudiera ser negra, ya que luego se bebe la sangre y se come la carne en un ejercicio de Teofagia durante el episodio de la comunión.
Además, como cualquier otro mago, usa y abusa de las palabras mágicas en los conjuros al bendecir, extremaunciar, absolver pecados, etc.

Luego nos avisa de que los que practican esoterismo normalmente quedan poseídos….para luego afirmar que en España sólo se dan tres casos de posesión al año, a pesar de los muchos españoles que lo practican ¡

Nos cuenta también, que al morir hay que buscar un túnel de luz porque “si lo encuentras, encontrarás allí a Dios”.

En su delirio afirma que hay vasos que “se mueven solos” (ignoro lo que se fuma o inyecta) y que no espera un fin del mundo próximo…. ya que él juega a la bolsa ¡¡¡.

Para colmo de los colmos, afirma que hay cielo, purgatorio e infierno, cuando vuestro anterior Papa había ya descartado la existencia del purgatorio.
En resumen, después de leerlo, me quedo alucinando virutas de colores. Y me reafirmo, una vez más, en que vuestra fantasía va paralela a vuestra ignorancia.


La segunda noticia en la que me he fijado es la que atañe a los “ciberbrujos” o “cibercuras”.

Resulta que los muy cucos se están exprimiendo la mollera para tratar de encontrar un método que les permita hacerse con presas jóvenes.

- ¿Qué técnica podríamos utilizar para poder hacernos con sus mentes? ¿Cómo podríamos domesticar sus costumbres?...
- Pues esta muy claro, al tratarse de jóvenes lo mejor es que usemos las nuevas tecnologías….
- Ya está ¡¡ Contactaremos con ellos a través de Internet. Nos haremos pasar por modernos y así los podremos seducir mejor ¡¡.

Por desgracia, y como decimos los bonobos: “Aunque el humano se vista de seda,… humano se queda”. Y por muy modernos que quieran parecer, a la hora de aconsejar, se muestran tan arcaicos y “carcas” como siempre.

Lo más vergonzoso del caso es que esa gente que se supone que no deben tener ni puta idea de cuestiones sexuales debido a su voto de castidad, tienen la desfachatez de atreverse a opinar y aconsejar sobre cuestiones sexuales.
Son solteros y presuntamente célibes pero sin sonrojo se atreven a obligar a los fieles que pretendan casarse a asistir a cursillos prematrimoniales ¡¡ impartidos por ellos ¡¡.

Queda claro que aunque les falte experiencia no deja de sobrarles caradura.

Veamos algunos ejemplos del consultorio que se han montado en Internet al más puro estilo “Elena Francis” de los años cincuenta del siglo pasado.

Se les nota a mil leguas que esos infelices están frustrados, y que en su mala leche pretenden que les acompañéis en sus frustraciones.

Son tan cortos, que proclaman que el sexo sólo debe darse dentro del matrimonio y debe estar encaminado hacia la procreación. “El amor de hombre y mujer queda situado bajo la doble exigencia de la fidelidad y de la fecundidad".
Por lo tanto, nada de sexo oral ni anal.

Y ¡¡ atención ¡¡ como el fin del sexo debe ser la reproducción, la Iglesia prohíbe el sexo a cualquier mujer que sea estéril o a todas las mujeres que hayan entrado en la menopausia ¡¡¡

Con esos mandatos y prohibiciones ¿Cómo es posible que alguien pueda hacerse católico?
¿Cómo podéis haceros seguidores de una religión que sólo acepta el sexo bajo contrato?
Me refiero naturalmente al contrato matrimonial.
Os casáis, firmáis el contrato…. Y ya podéis follar ¡¡
…No me negareis que sois unos primates muy peculiares.
No hay otro animal en el mundo que se le ocurra ejercer el sexo bajo contrato.
Precisamente por eso los bonobos consideramos que estáis tarados. Os empeñáis en complicarlo todo, impulsados por los manipuladores ensotanados.

Como podréis leer en el link del cibercura, una madre que tiene ya dos hijas y no quiere tener más, calibra la posibilidad de operarse. Pues bien, el cura cibernético se lo prohíbe diciéndole que debe ser fiel “a la visión cristiana de la vida”.

Otra madre de 43 años que ya ha tenido tres embarazos y sólo un hijo y que estuvo a punto de morir en el último embarazo que terminó con desprendimiento de placenta y muerte del niño en su octavo mes de gestación, desea poner fin a nuevos problemas usando un preservativo.
El cura se muestra inflexible y le niega tal posibilidad.
Poco importa que los médicos le avisen de que si se queda embarazada de nuevo su vida corre peligro.
Tampoco le importa al cura que la pobre mujer haya tenido ya dos cesáreas o que diga que tiene la columna destrozada, la respuesta es siempre la misma… NO AL PRESERVATIVO.
Señores, ¡¡ Ese animal no es racional ¡¡.

En otra intervención el cura desaconseja a una chica que actúa como médico en una ONG en África que recomiende el uso del preservativo porque “banaliza el sexo”.
A esos fulanos parece no importarles la cantidad de vidas que se pueden perder por causa del SIDA si se desaconseja el uso del condón.
Mientras las ONG y los Médicos sin Frontera intentan implantar el uso generalizado del preservativo entre los nativos para que el SIDA no continúe llevándose a millones y millones de africanos, el Papa, sus obispos y el ejército de misioneros les hunden todo el trabajo a los médicos, al proclamar que “no debe usarse el condón ni siquiera para prevenir el SIDA”.

Yo hago responsable al anterior Papa (por sus palabras), de la muerte de miles de africanos, concretamente la de TODOS los que han adquirido la enfermedad por hacerle caso y no utilizar el condón.
Creo sinceramente que tiene responsabilidad criminal en cada una de esas muertes.

Lo vergonzante del caso es que por un lado a los jóvenes les recomiendan la castidad y la pureza mientras que por otro lado, no son pocos los curas que tocan, abusan e incluso intentar copular con niños, excusándose en que “los niños les provocan”.



Otra noticia digna de ser comentada nos la ofrece la siniestra Conferencia Episcopal. El coeficiente intelectual de sus componentes queda de manifiesto con la siguiente manifestación: "Muchos bautizados olvidan su formación cristiana a causa de la secularización progresiva de la sociedad, por lo que desconocen a Dios"

A esos iluminados por la gracia del Espíritu Santo no se les ocurrirá nunca pensar que posiblemente la razón de abandonar el cristianismo y de alejarse de Dios se deba precisamente al hecho de que muchos bautizados optan más tarde por culturizarse, leer, no dejarse adoctrinar por curas o monjas y se deciden a REFLEXIONAR CON LÓGICA, en lugar de prestarse al lavado de cerebro.

Ni siquiera se les ocurre pensar a Rouco y sus secuaces, que los bautizados, en su inmensa mayoría, reciben el bautismo forzados por los padres cuando son bebés sin uso de razón.

Escapa de la mente de los obispos la posibilidad de pensar que, cuando crece el bebé y se hace adulto, es capaz de pensar por si mismo y le llega el momento de replantearse sus creencias.
Como saben muy bien los de la Conferencia Episcopal, en cuanto alguien tiene la posibilidad de acceder a la cultura, tiene tiempo de leer y voluntad para pensar por si mismo, lo más probable es que se de cuenta que le han engañado y de un fuerte patadón mande su formación cristiana al quinto infierno.

A los hechos me remito: En los primeros años de carrera hay bastantes universitarios creyentes, ya que muchos llegan con las mentes “trabajadas” (por no decir otra cosa) en colegios de curas y monjas. Al terminar la carrera, tres o cuatro años más tarde, la cantidad de creyentes en los últimos cursos de vuestras Facultades es ridícula.
¿Qué ha sucedido?
Pues que a lo largo de estos años se han acostumbrado a pensar, a leer y a hacer “gimnasia mental”, por eso se apartan de la religión.

Volviendo al panfleto eclesiástico de los de la CEE, veo que se “adornan” con una nueva frase que dice así: “… muchos no descubren la alegría de pertenecer a una comunidad cristiana”

¿Alegría? ¿De qué? Si la mayoría de creyentes están cargados de temores, amenazados con listas interminables de pecados, prohibiciones sexuales de todo tipo, miedo a penas eternas del infierno, forzados a penitencias y mortificaciones para poder salvar su alma, etc. Algunos estoy seguro que al doblar las esquinas miran hacia atrás para comprobar que no les sigue el diablo ¡¡¡
Sólo a alguien con un cucurucho en la cabeza se le puede ocurrir que todo esto sea causa de “alegría”.

A estos obispos les digo: “Señores, uno puede superar fácilmente la alegría de ser cristiano con el “orgasmo” de ser ateo”

Los ateos no creemos ni en dioses, ni pecados, ni infiernos, ni espíritus, por ello tenemos una existencia más relajada y feliz.

Sí creemos, en cambio y por desgracia, en los fantasmas, la aparición de este tipo de sujetos en las radios y en las televisiones para hacer las declaraciones antes mencionadas nos demuestran bien a las claras que los fantasmas verdaderamente existen ¡¡¡


Otra de las noticias destacadas esta semana nos habla de que el Papa ha logrado reunir en Roma a 3000 “vírgenes consagradas”.
El brujo blanco de Roma les dijo que: "siempre irradiarán la dignidad de ser la esposa de Cristo”
…¡¡¡ y yo que creía que la poligamia estaba prohibida por las leyes cristianas ¡¡¡

En primer lugar ante este acontecimiento uno no puede dejar de insistir en que tanto el Papa como cada una de estas supuestas vírgenes no dejan de ser un grupo de primates domesticados por las leyes religiosas e incuestionablemente obsesionados por el sexo.
Quiero dejar claro que un obseso sexual (según el diccionario) es el que piensa constantemente en el sexo. Tanto si piensan en la orgía continua como si practican su represión de por vida.

Todas y cada una de estas hembras de primate reunidas en el Vaticano actúan contranatura, se rebelan contra la lógica biológica que impera en el mundo natural libre.
Su fanatismo les lleva a renegar incluso de los órganos sexuales que su Dios supuestamente les ha colocado en su cuerpo para su disfrute.
Para mí y para los demás bonobos estas hembras de vuestra domesticada especie, en lugar de inspirarnos admiración nos inspiran la más profunda de las lástimas.
Las pobres… no saben lo que se pierden ¡¡.


Leo también que en esta última semana un terrible terremoto ha segado la vida de casi 100.000 humanos (entre muertos y desaparecidos) en China, mientras que en estas mismas fechas, en otro lugar de la Tierra, en Birmania, unos 135.000 nativos (entre muertos y desaparecidos) perdían la vida a consecuencia del paso de un ciclón.

Señor Rouco Varela, señores obispos de la Conferencia Episcopal: imagínense por un momento que a un bautizado, aún creyente, se le ocurra leer estas noticias y acto seguido le de por “PENSAR” sobre lo que ha leído.

Filosofando y filosofando se hace las siguientes preguntas y reflexiones:
La religión que me han inculcado me dice que Dios es infinitamente justo, infinitamente bueno y, además omnipotente, es decir, lo puede todo.
También me dice que nos ha creado a todos, es decir, todos somos sus criaturas.
Considerando estas premisas, me pregunto:
Si Dios es infinitamente bueno e infinitamente justo… ¿Cómo puede masacrar en un par de días a casi ¡¡ un cuarto de millón ¡¡ de sus criaturas? ¿Es ese un detalle de amor?
¿Cómo es posible que permita que se hundan casas, hospitales y colegios sepultando vivos a los que dormían en sus casas o convalecían en los hospitales? ¿Qué culpa tenían los centenares de niños que murieron aplastados en sus escuelas? ¿Es eso la Justicia DIVINA?
Por otra parte, si Dios es omnipotente y todo lo puede…. ¿Por qué consintió que todo ello ocurriera, en lugar de evitarlo?

Conclusión:
Dios no es omnipotente, ya que no puede evitar que actúen y causen desgracias las fuerzas de la Naturaleza.
Dios no es bueno, ya que masacra a sus propias criaturas.
Dios no es justo, ya que extermina a seres inocentes.

Por todo ello me convenzo de que Dios no existe… y si existiera, ese Dios no sería un espíritu digno de ser adorado.

Me han engañado… y por ello, me alejo de la comunidad cristiana ¡¡¡

Se dan cuenta señores obispos que fácil es que un bautizado abandone sus creencias… sólo hace falta que la verdad le ilumine… y su cerebro trabaje.
En realidad es tan sencillo como abrir un periódico o encender el televisor…. Y LUEGO PONERSE A PENSAR.

Que la sabiduría del bonobo os acompañe.

sábado, 17 de mayo de 2008

EL PROGRESO QUE OS MATA

Leo en los datos del Fondo Monetario Internacional y del Departamento de Agricultura de EE.UU. para el pasado 2007 que el 60% del consumo mundial de maíz se atribuye a la industria del etanol en EE.UU.
Lo mismo ocurre con la soja que se considera la principal materia prima para fabricar el biodiésel. En Europa y EE.UU. sería responsable del 50% consumo mundial en 2007.
Se vaticina que la industria del etanol en EE.UU. seguirá representando en años venideros más del 20% del consumo doméstico, mientras que en el año 2000 era “sólo” del 5%.

La demanda de maíz y soja irá en creciendo como consecuencia del disparatado aumento de vuestra población; dicen las previsiones de Naciones Unidas que la población mundial rondará por los 10.000 millones en el 2050.
Cada vez habrá más bocas que alimentar, pero os veréis obligados a compartir esta soja y este maíz con vuestros coches, que para moverse deberán “comer” lo mismo que vosotros.

Esta desmesurada demanda de maíz y soja chocará con una oferta cada vez más limitada de tierra cultivable, con lo que os veréis obligados a cortar más y más bosques.
Como consecuencia de estos cultivos masivos necesitareis más y más agua la cual es cada día más escasa por culpa de la sequía provocada por el cambio climático, consecuencia de vuestras torpes maniobras humanas.
Las cada día las más frecuentes riadas seguirán asolando campos y llevándose tierras de cultivo.
Por otra parte el monocultivo en grandes extensiones eliminará la biodiversidad y creará un desequilibrio que tendrá consecuencias en el clima y el medio ambiente

Veo que el precio del trigo ha subido un 218% en los últimos dos años y el del maíz un 150% en el mismo período de tiempo, mientras la soja pasaba de 223 a 496 dólares la tonelada y la colza saltaba de 721 a 1.640 dólares.

El precio del maíz, trigo y soja seguirá disparándose por:
1) La demanda provocada por el fuerte aumento de la población humana.
2) La disminución de tierra cultivable.
3) Las restricciones de agua.
4) El aumento del parque móvil.

Los que seáis capaces de abrir un periódico por las mañanas para poder enteraros de vuestro asqueroso comportamiento como especie en el día anterior, sin duda habréis leído en multitud de ocasiones que la hambruna afecta ya a 40 países en los podrían estar condenados a morir de hambre y sed más de 3.000 millones de primates humanos.
Y es que casi 1/3 del maíz que se cultivó el año pasado en EE.UU. (80 millones de toneladas) se dedicó a alimentar coches en lugar de vuestros estómagos famélicos.

Como el maíz va tan buscado, se aumenta su producción a expensas de cosechas de otros cereales, como el arroz, lo que hace que se dispare la escalada de precios en toda la cadena alimentaria. El arroz ha subido hasta los 500 dólares la tonelada.
La OCDE y Naciones Unidas, aseguran que el precio de los alimentos aumentará un 50% en los próximos diez años por culpa de los biocombustibles.

Poco importa que se alcen voces de protesta por doquier.
Para defenderos de lo evidente argumentáis que los biocarburantes ahorran emisiones de CO2….¡¡ MENTÍS ¡¡
Para conseguir el combustible usáis fertilizantes y maquinaria y luego debéis destilar el producto, lo que en total dispara la cantidad de CO2 liberado en la atmósfera. Como resultado de todos estos procesos producís más polución fabricando el biodiésel que la que producen los coches alimentados con gasolina.
La deforestación causada como “daño colateral” empobrece, aun más, la calidad del aire que respiramos.

Viendo a tantos millones de vuestros congéneres pasando hambre ¿Cómo se os puede ocurrir convertir alimentos en combustible?


¿Os parece racional o inteligente alimentar antes a los depósitos de vuestros coches que a los estómagos de vuestros hermanos?



¿De verdad os creéis racionales e inteligentes… o pretendéis tomaros el pelo a vosotros mismos?

Lo que sí os aseguro es que a nosotros los bonobos no nos convenceréis.

Seguís (y sin duda seguiréis) siendo la criatura más estúpida que jamás haya pisado la tierra.



Que la racionalidad del bonobo sirva de ejemplo a vuestra irracionalidad humana.

viernes, 9 de mayo de 2008

UTILIZANDO HERRAMIENTAS

No hace mucho aun os atrevíais a decir que una de las grandes diferencias entre los “hombres y los animales” estaba en el hecho de que el hombre era el único ser que utilizaba herramientas.
Tal afirmación era el resultado de vuestra ignorancia supina, y como la ignorancia es muy atrevida, una vez más metíais la pata hasta el remo.

Para demostraros cuan equivocados estáis paso a detallaros a continuación unos cuantos ejemplos en los que se ha demostrado de manera concluyente el uso de herramientas en otros animales.


El pájaro carpintero de las Ga­lápagos (Cactospiza pallida) no po­see el largo pico del típico pájaro carpintero, pero compensa su deficiencia utili­zando espinas de cactus, los cuales usa para sacar in­sec­tos de las grietas de las cortezas (Bowman 1961). La espi­na del cac­tus es un perfecto substituto de su largo pico.





La tribu de los Yanomamis, de Sudamérica, uti­lizan como cu­chillo el inci­sivo in­ferior de un roedor, el agouti (Chagnon, 1968).





El dien­te se uti­liza como herramienta de la misma manera que lo utili­za el propio animal; la tribu carece de dientes tan agudos como los de estos roe­dores pero sustituyen su deficiencia utilizando las piezas dentarias arran­ca­das al agouti.


La Cyanocitta cristata, cuando se encuentra en cautividad encerrada en una jaula y no puede acceder a restos de comida que se encuentran fuera, a­rranca tiras de papel, las arruga, y las pasa a través de las rejas de la jaula para acercar pe­dazos de comida que se encuentran fuera de su alcance (Jones y Kamil 1973).




Las herramientas son también uti­li­zadas por alimoches (Neophron percnop­terus) los cuales lanzan pie­dras contra hue­vos de avestruz que no pueden romper, hasta que logran quebrarlos (Van Lawick-Goodall 1970).



Las nutrias se sumergen en busca de una piedra plana que colocan sobre su pecho para partir contra ella las valvas de moluscos.



Otros muchos animales (y no necesariamente vertebrados) utilizan herramientas.

Las hormigas (Aphaenogaster senilis) que se encuentran con una espesa gota de miel, buscarán pequeñas astillas de madera o cualquier particula sólida que sumergirán en el viscoso líquido. Esperarán el tiempo suficiente para que las astillas queden bien impregnadas de miel, acto seguido serán transportadas al nido. Las astillas habrán servido a las hormigas como herramientas para transportar la miel que de otra manera no se hubiese podido aprovechar.
En este ejemplo hablamos, no ya de vertebrados cercanos evolutivamente a vosotros, sino que nos referimos a invertebrados, concretamente insectos, utilizando herramientas.

Me imagino vuestras caras al descubrir que incluso los animales que se deslizan bajo la suela de vuestros zapatos son capaces de utilizar herramientas.
Como cura de humildad os va fenomenal ¡¡

Y no solamente os veis ahora obligados a admitir que los otros animales utilizan también herramientas sino que encima, debéis admitir algo aún más doloroso y humillante para vuestro ego, como es el hecho de que muchos de ellos fabrican y modifican sus herramientas para mejor solucionar los problemas que se les van presentando.
Aprenden a confeccionar y a modificar sus herramientas observando a sus compañeros de especie y de grupo.

Los jó­venes chimpancés ob­servan a sus ma­dres capturando termitas, luego cogen las he­rramientas que ella deja y juegan con ellas e intentan usarlas a su vez (Goodall 1970).

Por otra parte, la distribución de la utilización de herramientas en dife­rentes áreas prueba en el chimpancé la evidencia de que el uso de éstas se adquiere como tradición cul­tural.





Existen siete áreas en Africa en la que los chimpancés recolec­tan ter­mitas, generalmente Macrotermes); en unos lugares se les ha visto en el acto de capturarlas y en otros se han encontrado sus herramientas cerca de los ter­mite­ros (McGrew et al. 1979).
En Kasoje (Tanzania), donde la Ma­cro­termes es rara, los chimpan­cés capturan otra termita, la Pseu­da­can­thotermes así como también hor­migas.
Los chimpancés del Gabón, por su parte, ignoran las Macrotermes y utili­zan las he­rramientas para obtener hor­migas.



El uso de palos para obtener miel ha sido observado en sólo tres áreas, en Gombe y Kasakati en Tanzania, y en el Zaire (Teleki 1974).

Se han comparado los métodos utilizados por los chim­pancés para recolectar termitas en tres poblaciones si­tuadas en Gombe en el Este de Africa, Okorobiko (Río Muni) en Africa Cen­tral, y Mon­te Assirik (Senegal) en el Oeste de Africa.

Los chimpancés de Okorobiko no capturan las termitas de la misma manera que los otros; utilizan largos palos para hacer agujeros en los termiteros y recogen las termitas a mano. Esta es precisamente la técnica más e­fectiva para esta área debido a la particular estructura de los ter­miteros.

Hay otras diferencias en el uso de herram­ientas entre los chimpancés de estas tres áreas: los de Gombe no pelan la cor­teza de las ramas antes de usarlas y a menudo utilizan los dos extre­mos para hurgar por turno, mientras que los de Monte Assirik nor­mal­mente pelan las ramas y utilizan sólo un extremo, lo cual de­mues­tra dife­rencias en las tradiciones culturales.
En algunos lugares usan otros objetos diferentes a palos y hierbas, como he­rramientas (Teleki 1974).

Algunos chimpancés se lavan los excremen­tos, la sa­ngre, el pol­vo, y el barro, pero según la experta en chimpancés Jane Goodall, sólo lo ha­cen los de Gombe.

Los chimpancés también aplastan y mastican ho­jas para uti­lizarlas como esponjas para, una vez empapadas de agua y ex­primidas, utilizarlas para beber.
La transformación de la hoja en esponja la efectúa el chimpancé al encontrarse con un de­pósito de agua de lluvia retenida en la concavidad de un tronco a la que no puede acceder para beberla. Con su "invento" el agua le será asequi­ble y habrá resuelto el problema de manera inteligente.
Esta téc­nica sólo se ve en otra pobla­ción semicautiva en Gambia (Goodall 1973).

Los chimpancés pueden utilizar también hojas para obtener los res­tos de tejido cerebral del cráneo de un animal muerto (Teleki 1973).

Como veis, resuelven sus problemas a base de razonar, y si razonan significa que son racionales.
Vuestra ignorancia os hace creer que sólo vosotros sois racionales, pero la evidencia, una vez más, os deja en el más grande de los ridículos.

Los demás animales también hacen uso de herramientas para amenazar o atacar, para obtener comida, o para cuidar su cuerpo. En efecto, todos los póngidos y muchos monos han sido observados lanzando ramas de árbo­les para asustar a los intrusos.

Los babuinos (Pap­io ursinus) bom­bardean con piedras desde la cima de una colina o a­cantilado, a los obser­vadores humanos que se encuentran abajo (Hamilton 1975).

Los chimpan­cés en determinadas ocasiones utilizan pa­los como garrotes para gol­pear a depredadores diseca­dos (Kortland 1972).

Otros chimpancés que habitan en Liberia y en la Costa de Marfil, uti­lizan piedras para romper las duras cáscaras de ciertos frutos (Tele­ki 1974). Se trata de una tra­dición lo­cal. Estas piedras son transportadas desde una cierta distancia y suelen tener el peso necesario para romper la cáscara.
El animal parece conocer la fuerza que debe aplicar y la altura desde la que debe dejar caer la piedra para reventar el fruto que previamente habrá depositado en la concavidad de alguna raíz de árbol que le servirá como yunque.

También algunos babuinos en estado salvaje rompen frutos du­ros golpeán­do­les con piedras sobre una roca, y los macacos de Singa­pur limpian su co­mida con hojas (Chiang 1967 y Marais 1969).

Los babuinos se limpian restos de fruta de la boca frotan­do con una piedra, y los chimpancés se limpian los dientes con pali­tos o astillas (Goodall 1970, McGrew y Tutin 1973).

Además, los monos y póngidos son capaces de utilizar el mismo ob­jeto para diferentes propósitos. Como hemos visto las piedras pueden ser proyectiles, se pueden utilizar para romper las duras cortezas de los frutos, o para lim­pia­rse; y los palos sirven como mazas, para cavar, y para hurgar en los nidos de los in­sectos.

Otro ejemplo del uso de herramientas lo tenemos en Gombe donde se ali­men­tó durante mucho tiempo a los chimpancés con bananas que se sacaban de unas ca­jas; en varias ocasiones trataron de abrir las ca­jas con palancas fa­bricadas con ramas a las que les ha­bían pelado las hojas y mordido un extremo para afilarlo. Una hembra que jamás había observado las cajas con ante­rio­ridad, vio a los demás trabajando desde lejos, y espero a que se mar­charan para aplicar la palanca a la caja en el pri­mer in­tento (Goodall 1970).

Los trabajos de Wright, en 1972, describen el comportamiento ob­ser­vado en el orangután llamado Aba­ng, al cual se le enseñó a utili­zar un pedernal para cortar un cordel que ataba un paquete, para poder hacerse con la comida de su interior. Con anterioridad se le había enseñado a fabricar el peder­nal golpeando una gran pie­dra de cuar­zo. En muy pocas sesiones dominó la téc­nica y utili­zó las es­quir­las para cortar el cordel.

Está pues dentro de la capacidad de los grandes pri­mates la posibilidad de utilizar una herramienta para pro­ducir otra.
Con ello se pone de nuevo en evidencia a los humanos que afirman que tal habilidad sólo es posible en el ser humano.



Que los ejemplos que la Naturaleza os coloca día a día ante vuestras narices os hagan bajar de vuestro pedestal.

jueves, 1 de mayo de 2008

LA BUENA MUERTE

En las praderas de mi querido Congo he observado varias veces la misma escena. Un pequeño cérvido apura los últimos minutos de su corta vida. Está gravemente enfermo, se tambalea, avanza dando traspiés y de pronto se cae definitivamente para entregarse a la agonía que le llevará a la muerte. Esta situación no pasa inadvertida a alguna ave carroñera que hace acto de presencia en la escena preparándose para un festín.
A nosotros los bonobos, el revoloteo lento, circular e insistente de estos pajarracos en una determinada zona nos indica la presencia en este punto de un animal muerto o agonizante. Estos necrófagos siempre son los primeros en llegar junto al animal en estado terminal. Si todavía se mueve, esperan pacientemente a su lado a que exhale su último suspiro.

Observo que a vosotros, los monos domésticos os ocurre tres cuartos de lo mismo. A la que caéis gravemente enfermos y dais con vuestros huesos en un hospital para pasar entre dolores los últimos días de vuestra vida, no tardareis en detectar la presencia del ave carroñera de turno que se aprovecha de la ocasión. Sólo que en vuestro caso el buitre llevará, sotana, clergyman, hábito de monja… o se camuflará vestido de paisano para ejercer de "novio de la muerte". La única diferencia está en que no le interesa vuestro cuerpo, sino vuestra “alma”.

Hace ya cierto tiempo a un conocido mío le ingresaron en un hospital. Entró para morir con un enfisema terminal y fractura de fémur. Nada más entrarle en la habitación se presentó una monja para preguntarle de sopetón si era creyente. El paciente tragó saliva y reunió fuerzas para contestar que sí. Entonces la muy “humana” (vosotros diríais la muy “cerda” o la muy “zorra”), le espetó a dos palmos de su cara la siguiente frase: “Mejor, porque algunos verán pronto al Señor y conviene que estén preparados…¿Verdad que me entiende?”. Os juro que si me hubiese encontrado yo en la habitación y en lugar de ser bonobo hubiese sido chimpancé, me hubiera lanzado contra la yugular de la monja al instante.
¿Cómo es posible que dejen suelta a semejante elemento para que se mueva con toda libertad por entre las camas de enfermos terminales para hundirles sicológicamente y quitarles toda esperanza de recuperación? ¿En nombre de que caridad cristiana se le puede decir de golpe a un paciente que se va a morir, de manera tan brutal y sin la menor consideración?



Me entero por vuestros periódicos que una destacada líder del PP (Partido Puritano) que lleva el nombre de Esperanza, acaba de contactar con el Súper jefe de la Conferencia Episcopal, un tal Rouco Varela para pedirle que en el tribunal que deba valorar la concesión de cuidados paliativos a un enfermo terminal este presente uno de los brujos de su tribu.
Supongo que esta señora estará encantada de pagar a la Iglesia parte del inmenso favor electoral que le hizo al PP al recomendar a sus fieles que no votasen al PSOE, aunque afortunadamente al final no les sirvió de nada.
El brujo estará contento porque se hallará en su ambiente, tendrá su parcela de poder e intentará hacer prevalecer su criterio por encima del de los médicos.
Pero… ¿Y el pobre paciente? ¿Qué será de él si el brujo se sale con la suya y le “condena” a sufrir los terribles dolores terminales de su enfermedad sin cuidados paliativos?
Recordad que no hace mucho uno de los de su clan (el arzobispo de Pamplona) nos recordaba siniestramente a todos que Cristo murió en la cruz “sin cuidados paliativos”. Otros de su mismo palo insisten en que sufrir horribles dolores es bueno para el alma, ya que sirve para purgar los pecados cometidos ¡¡.

Como nosotros, los bonobos, somos animales racionales, creemos que de encontrarnos en vuestro lugar dejaríamos al paciente que tomara la decisión de si quiere vivir o morir con sufrimiento o sin él, al fin y al cabo cada paciente es propietario de su vida.
Vosotros los humanos, en cambio, como animales irracionales que sois, dejáis que sea un comité en el que habéis embutido a un cura, el que decida si debéis sufrir hasta la muerte o no.
Como siempre, los bonobos pensamos que vuestra irracionalidad es patente y que vuestra supuesta inteligencia hace aguas por todas partes.

Los curas siempre se apoyan en el terror de la muerte y cuando os llega la ocasión no pueden faltar a vuestro lado para incordiaros y añadir terror al terror.
Siempre juegan con ventaja aprovechándose de la psicosis del más allá.

Me ponen en mis manos un pequeño misal titulado “El joven cristiano”. El propietario del misal me cuenta que fue una de las víctimas de la tribu salesiana del colegio de Horta.

En dicho colegio todos los primeros viernes de mes reunían a todos los niños acogidos bajo su tutela en la capilla y una vez allí, les obligaban a leer todos a la vez y en voz alta “El ejercicio de la buena muerte”.

La edad de las pobres criaturas oscilaba de los NUEVE añitos a los 16.
En la página 203 del misal empieza el susodicho ejercicio con una frase lapidaria que me llama la atención: “Se puede dar por asegurada la salvación de aquel que todos los meses hace bien este Ejercicio” (San Juan Bosco).
La siguiente frase tampoco tiene desperdicio: “Toda nuestra vida debe ser una preparación para tener una buena muerte” .
No hace falta decir que según los curas una “buena muerte” no significa una muerte plácida y sin dolor sino lo que vais a leer a continuación y que yo, previo escaneo del misal, os inserto horrorizado en este post.

ORACIÓN A NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO PARA OBTENER UNA BUENA MUERTE

¡Oh Jesús, Señor mió, Dios de bondad. Padre de misericordia!, yo me presento ante Vos con el corazón humillado y contrito; os encomiendo mi última hora y lo que después de ella me espera.

Cuando mis pies, ya inmóviles, me adviertan que mi carrera en este mundo está próxima a su fin. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis manos, trémulas y entorpecidas, no puedan ya estrecharos, j oh bien mió crucificado!, y contra mi voluntad os dejen caer sobre el lecho de mi dolor. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis ojos llenos de tinieblas y desenca­jados ante el horror de la cercana muerte fijen en Vos sus miradas lánguidas y moribundas. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis labios, fríos y temblorosos, pronun­cien por última vez vuestro adorable nombre. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis mejillas, pálidas y amoratadas, ins­piren lástima y terror a los que me rodeen, y mis cabellos, húmedos con el sudor de la muerte, eri­zándose en la cabeza, anuncien mi próximo fin, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis oídos, próximos a cerrarse para siempre a las conversaciones de los hombres, se abran para oír vuestra voz al pronunciar la sen­tencia irrevocable que fijará mi suerte por toda la eternidad. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mi imaginación, agitada por horrendos y espantosos fantasmas, quede sumergida en con­gojas de muerte, y mi espíritu, turbado con la visión de mis iniquidades y el temor de vuestra justicia, luche contra el ángel de las tinieblas, que tratará de arrancarme el recuerdo consolador de vuestras misericordias y precipitarme en el abismo de la desesperación, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando oprimido mi débil corazón con los do­lores de la enfermedad, se vea asaltado por el horror de la muerte y desfallecido por los esfuer­zos realizados contra los enemigos de mi eterna salvación. Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando derrame las últimas lágrimas revelado­ras de mi destrucción, recibidlas, ¡oh Jesús mío!, en sacrificio de expiación para que muera como victima de penitencia, y en aquel momento terrible, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mis parientes y amigos, apretados alre­dedor de mi lecho, se compadezcan de mi lasti­moso estado y os invoquen en mi favor, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando, perdido ya el uso de todos los senti­dos, el mundo entero haya desaparecido de mi vista y gima en el estertor de la última agonía y en las congojas de la muerte, Jesús misericor­dioso, tened piedad de mí.

Cuando los últimos alientos del corazón obliguen a mi alma a salir del cuerpo, aceptadlos como actos de una santa impaciencia de ir a Vos, y Vos, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Cuando mi alma salga de los labios entreabier­tos despidiéndose para siempre de este mundo, y deje este cuerpo pálido, frío y sin vida, aceptad la destrucción de mi ser como un homenaje que yo ofrezco a Vuestra Divina Majestad, y enton­ces, Jesús misericordioso, tened piedad de mí.

Obligar a niños de 9 y 10 años a leer en voz alta en una iglesia la truculenta y horrorizante descripción de lo que será su muerte roza la obscenidad y nos habla del sadismo sin límites que es propio de la Iglesia católica. Pero, por si aún lo dudáis, no os perdáis la descripción detallada que hace el mismo misal en su página 57 sobre que es y como es el infierno…. Dice así:

EL INFIERNO

El infierno es el lugar destinado por la divina justicia, para castigar con eternos suplicios a los que mueren en pecado mortal.

La primera pena que los condenados padecen en el infierno es la de sentido, al ser atormentado todo su cuerpo por un fuego que arde horriblemente sin disminuir jamás.
Éste penetrará por los ojos, la boca y por todo el cuerpo, y cada uno de los sentidos sufrirá una pena especial.
Los ojos quedarán oscurecidos por el humo y las tinieblas, y aterrorizados al ver a los demonios y a los demás condenados.
Los oídos no oirán más que gritos, aullidos, llantos y blasfemias.
El olfato será atormentado con el hedor de azufre y betún ardiendo, que lo sofocará.
La boca sufrirá sed ardentísima y padecerá un ham­bre canina: Famem patientur ut canes.
Dios per­mitió que el rico Epulón, en medio de aquellas tor­mentos, dirigiese una mirada a Lázaro, pidiendo una gota de agua para calmar el ardor que le con­sumía; pero aun ésta le fue negada.
Aquellos in­felices en medio de las llamas, devorados por el hambre y la sed, atormentados por el fuego ince­sante, gritan y se desesperan.

¡Ah, infierno, infier­no, qué desgraciados son tus moradores! ¿Qué dices, hijo mío? Si hubieras de morir en este mo­mento, ¿a dónde irías? Si no puedes ahora soportar una chispa de fuego en la mano, la ligera llama de una vela, ¡cómo podrás sufrir aquellas llamas por toda la eternidad?
Considera e remordimiento que experimen­tará el alma de los condenados. Su memoria, en­tendimiento y voluntad padecerán terribles tor­mentos. Recordarán continuamente el motivo por que se perdieron, esto es: por un placer pasajero, por una pasión no reprimida; y ese pensamiento será para ellos el gusano roedor que no morirá ja­más: Vermis eorum non moritur.
Pensarán en el tiempo que Dios les había concedido para reparar sus faltas; en los buenos ejemplos de sus compañeros; en los propósitos formados, sin ponerlos ja­más en práctica. Pensarán en las pláticas oídas, en los consejos de sus confesores, en las buenas inspiraciones para no pecar; y viendo que ya no hay remedio, lanzarán rugidos desesperados.
La voluntad no tendrá ya nada de lo que desea, su­friendo, por lo contrario, todos los males.
El en­tendimiento conocerá el bien inmenso que ha per­dido. El alma, separada del cuerpo y presentada ante el divino Tribunal, ha visto la belleza de Dios, ha conocido su bondad, ha contemplado por un instante el esplendor del Paraíso, ha oído quizá los dulcísimos y armoniosos cantos de los Ángeles y bienaventurados, y todo esto le es arrebatado para siempre... ¡Oh dolor! i Qué tormento tan ho­rroroso! ¿Quién podrá resistirlo?

ETERNIDAD DE LAS PENAS

Considera, hijo mío, que si caes en el infier­no, no saldrás de el jamás. Allí se padecen todas las penas y todas por siempre.
Pasarán cien años, mil... y el infierno empezará; pasarán cien mil, cien millones, mil millones de años y de siglos... y el infierno estará en su principio.

Si un ángel anun­ciara a un condenado que Dios había de librarle de las penas del infierno después de pasar tantos millones de siglos como gotas de agua hay en el mar, hojas en los árboles y arenas en el mundo, esta noticia le serviría de indecible consuelo. "Es cierto, exclamaría, que es inmenso el número de éstos, pero llegará, al fin, un día en que éstos habrán concluido." Mas, ¡ay!, pasarán estos millones de siglos y una infinidad, de otros... y el infier­no empezará.
Cada condenado quisiera decir a Dios: "Señor, aumentad cuanto queráis mis penas, con tal que me deis la esperanza de verlas concluir algún día." Pero no; este término y esta esperanza no llegará jamás.

Si, a lo menos, el condenado pudiese enga­ñarse a si mismo y decir para si: "i Quién sabe si Dios algún día tendrá piedad de mí y me sacará de este" abismo!" Pero, no; ¡jamás abrigará esta esperanza! El condenado tendrá siempre presente la sentencia de su condenación eterna.

Estos tor­mentos, este fuego, estos horribles gritos no concluirán jamás. ¡Siempre!, verá escrito en las lla­mas que le devoran: ¡siempre!, en la punta de las espadas que le traspasan; ¡siempre!, en las horri­bles fisonomías de los demonios que le atormentan; ¡siempre!, en aquellas puertas que no se abrirán jamás para él.

¡Oh eternidad! jOh abismo sin fondo! ¡Oh mar sin límites! ¡Oh caverna sin sa­lida! ¡Cuánto horror! jOh, maldito pecado, qué tremendo suplicio preparas al que te comete! ¡Ay, hijo mió, no cometas más pecados en tu vida!

Lo que debe espantarte en todo tiempo, es el pensar que este horrible abismo está siempre abierto bajo tus pies y que basta un solo pecado mortal para caer en él.

¿Comprendes, hijo mío, lo que lees? El pecado, que cometes con tanta faci­lidad, merece una pena eterna.
Una blasfemia, una profanación de los días festivos, un odio, una mur­muración, un hecho, un dicho, un pensamiento obsceno, bastan para condenarte a las penas del infierno.



Sinceramente pienso que es un autentico crimen traumatizar la mente de una criatura con tanto sadismo.

No se trata de un libro comprado por un particular en una librería, se trata del misal escogido entre muchos otros para representar la filosofía salesiana en un colegio de más de quinientos alumnos.

Y no se os ocurra decir que esto se decía “antes”. Vuestro actual papa acaba de recordaros que “el infierno existe y es eterno”.

Sembrar el terror a la muerte y al infierno es la estrategia que siempre a seguido la Iglesia para adquirir poder. Primero aterroriza con el infierno y luego se ofrece como único remedio para la salvación eterna. De esta manera de actuar a vivido a lo largo de la Historia.

Francamente no entiendo como podéis adorar a un Dios capaz de crear un infierno tan atroz y eterno para vosotros. Y encima proclamáis que vuestro Dios es todo amor.

Os explican que basta con una blasfemia o una sola murmuración o un solo pensamiento obsceno y ya vais al infierno para toda la eternidad… y vosotros insistís en que vuestro Dios es infinitamente justo ¡¡¡

Lo dicho, por mucho que os esforcéis nunca llegareis a convencernos de que sois animales racionales, para nosotros sois el paradigma de la irracionalidad.

Como los humanos sois tan poco inteligentes nunca se os ocurrirá preguntarles a los curas ¿cómo es posible que un Dios infinitamente bueno haya podido crear este tipo de infierno para torturar eternamente a sus criaturas?
Si alguna vez os animáis a hacerles la pregunta veréis como se ponen rojos, tartamudean, carraspean, tosen, sudan y desvían la mirada… este es el momento para correrles a gorrazos. ¡¡ Ya veréis como corren ¡¡

Haceros la idea que cuando os llegue la última hora, dependiendo del hospital en el que estéis y con la actual ley vigente, algunos de estos pajarracos pueden revolotear cerca de vuestra cama.
Como buenos brujos aparecerán con estampas, oleos, crucifijos y con todo tipo de parafernalia con la que se adornan tales individuos. Se expresaran en latín mientras multiplicaran los aspavientos y los gestos rituales aliñados con la aspersión de agua bendita que tanto nos recuerdan a un exorcismo más que a otra cosa.
Todos aspiramos a morir en paz, seguro que los monos humanos también. Todos queremos en estos momentos tranquilidad y ausencia de dolor.
Pero si en los comités de ética de la Seguridad Social os colocan a un cura (y para más INRI católico) tenéis ya el veredicto infectado de censura religiosa.

Si tenéis la maldita suerte de que os toque un brujo integrista partidario del dolor para expiar los pecados… vais listos.
Ni se os ocurra mencionar la palabra eutanasia, ni en su forma pasiva, ni mucho menos activa.
La tribu de curas esta en contra de la eutanasia pero, los muy cucos esconden a los no versados que, según sus santos libros, un centurión se apiadó de la agonía de Jesucristo y con una certera lanzada le aplicó la eutanasia activa para que dejara de sufrir, vosotros no tendréis derecho a este privilegio.

El convenio firmado entre Esperanza Aguirre y Rouco Varela (Estado laico/ Iglesia católica) no deja de ser una renovación de un acuerdo anterior firmado por su antecesor, Alberto Ruiz Gallardón. El acuerdo para que la Iglesia tenga voz y voto en detalles como la sedación de enfermos terminales puede tener funestas consecuencias.
No se trata de que un paciente pueda tener el “consuelo espiritual” de un capellán, si así lo desea, sino que la Iglesia pueda meter sus santas narices en discusiones que afectan a la práctica médica

El hecho de que un cura forme parte de un comité de ética de los hospitales públicos de Madrid, puede abocar a mucha gente a una muerte lenta y agónica contra su voluntad y la de su familia.
Los curas católicos actuarán como moralistas junto con los médicos que lo harán como técnicos. Si ya es triste que os quieran hacer creer que moral es igual a ética, lo más disparatado del caso es que serán los curas católicos los que aconsejaran que tipo de final han de tener los fieles de otras creencias, como los musulmanes, judíos, testigos de Jehová, etc. y lo que es mucho peor, tendrán derecho a opinar sobre el final de los cada día más numerosos ateos.
Las relaciones de cooperación entre la Iglesia y el Estado que recoge el artículo 16.3 de la Constitución no puede ser discriminatorio para las demás creencias religiosas o las convicciones ateas.

No basta con que los crucifijos cuelguen aun en las escuelas y en las juras de los ministros de un estado aconfesional, me temo que ahora los ateos e integristas musulmanes los verán rondar cerca de sus narices en los momentos finales para colmo de sus males.
Los curas llevan siglos intentando organizar vuestros placeres, vuestra sexualidad, vuestros pensamientos, la declaración de Hacienda, lo que deben estudiar vuestros hijos (y lo que no) e incluso se atreven a dirigir vuestro voto cuando se acercan las elecciones. Pues bien, no tienen bastante con ello... ahora pasarán también a organizar vuestra muerte en los hospitales.

¡¡ Suerte que los bonobos nos libramos de todo esto ¡¡