Como cada año, Amnistía Internacional ha publicado este año un informe de casi quinientas páginas sobre las violaciones de los derechos humanos a lo largo y ancho del orbe durante el año 2007.
Debo insistir, una vez más, en que este comportamiento generalizado de asesinatos, torturas y violaciones que se da en TODOS los países del mundo por ideas políticas o religiosas es un comportamiento exclusivamente humano, es decir, es un comportamiento que siempre se ha dado en el animal humano y NUNCA en otro animal.
Digo esto porque estoy hasta las mismísimas gónadas de oír una vez tras otra a los monos domésticos emitir la expresión “ ¡ Que bestias ¡ ... o ¡ Que animales ¡ “ cada vez que leen, ven, o se enteran de alguno de estos comportamientos violentos propios del primate humano, NUNCA se os ocurrirá utilizar la expresión correcta … ¡¡ QUE HUMANOS ¡¡. Y nunca la utilizareis porque sois, como especie, un atajo de monos soberbios e ignorantes.
El reportaje de Amnistía Internacional pone, como cada año, los pelos de punta, especialmente cuando consideramos que es sólo la punta del iceberg de la violencia humana.
En el post de esta semana haré mención de las denuncias que Amnistía Internacional vierte sobre vuestro comportamiento en España en lo referente a lo que vosotros llamáis “derechos humanos”.
Acusa a vuestro país de que siguen siendo frecuentes las violaciones de los derechos humanos por los agentes de hacer cumplir la ley y que, además, actúan con toda impunidad.
En un primer apartado Amnistía Internacional denuncia al mundo el trato que reciben en España algunos de los inmigrantes que intentan buscarse una vida mejor en vuestro país.
Quien nos iba a decir que seríais capaces de tratar así a los inmigrantes, precisamente vosotros, que no hace muchos años abarrotabais muertos de hambre, trenes y trenes para invadir Francia, Alemania, etc., buscando campos en tiempo de vendimia en el país vecino o intentando encontrar un trabajo en cualquiera de las fábricas alemanas, cuando no, una plaza de camarero, de asistenta o de “aupair” en Inglaterra.
Ahora son otros los que llegan a vuestra patria para ser vuestros camareros, para ser vuestras sirvientas, para asistiros en vuestros hospitales y para limpiar el culo de los ancianos que tenéis en vuestras casas. Y encima, son los que os salvan vuestra Seguridad Social y os aseguran las pensiones de vuestra jubilación durante los próximos veinte años.
Dice textualmente el informe de Amnistía Internacional:
“A lo largo del 2007 se impidió el acceso a territorio español a personas inmigrantes y solicitantes de asilo, mediante procesos llevados a cabo en centros extraterritoriales en condiciones que no se ajustaban a las normas internacionales.
Se expulsó a menores no acompañados sin las debidas garantías para su seguridad.
Las inmigrantes víctimas de violencia en el ámbito familiar siguieron encontrando obstáculos para obtener protección, justicia y reparación, y tuvieron, además, dificultades de acceso a los recursos básicos.”
"En julio, el Ministerio del Interior dio a conocer un borrador de protocolo de actuación para la Policía Nacional y la Guardia Civil, relativo a medidas de seguridad en la repatriación y el traslado de detenidos, incluidos inmigrantes irregulares.
Este protocolo no reflejaba debidamente las normas europeas de derechos humanos pertinentes ni las recomendaciones de organizaciones internacionales sobre el uso de la fuerza y las técnicas de inmovilización por parte de los agentes encargados de hacer cumplir la ley durante las expulsiones".
Aunque el documento oficial de la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil indica que “el uso de medios coercitivos para reducir a los sin papeles no pueden poner en peligro su dignidad ni integridad física”, y que “El uso de estos procedimientos deberá ser proporcionado y con respeto a los derechos individuales de los repatriados” lo cierto es que el documento permite el uso de lazos de seguridad (en realidad bridas de plástico), cascos, prendas inmovilizadoras homologadas (en realidad “camisas de fuerza”), cinturones, esposas e incluso cinta reforzada, más conocida con el nombre comercial de “cinta americana”.
Cualquiera de vosotros se dará cuenta de que el uso de este material difícilmente respetará la dignidad del inmigrante que se devuelve a su país y dudo mucho que respete los derechos de los repatriados.
De hecho, como muy bien apunta Amnistía Internacional, tales medidas contravienen “la prohibición internacional de trato cruel, inhumano o degradante y causar asfixia u otros daños físicos graves a la persona expulsada.”
Por otra parte el documento oficial autoriza acciones violentas contra el detenido, las cuales (en el colmo del cinismo) recomienda que se lleven a cabo “lejos de la vista de niños y adolescentes”.
La normativa deja a criterio del responsable policial del vuelo “la posibilidad de mantener desorientados a los repatriados teniendo durante todo el viaje las «cortinillas cerradas» para evitar que los sin papeles intuyan adónde se dirigen”…. En fin, lo que tantas y tantas veces habéis visto en las películas de secuestros.
También, como a las victimas de secuestros, se mantiene la posibilidad de trasladarlos narcotizados “bajo prescripción médica”
Cabe esperar que no se vuelva a repetir la vergüenza nacional que dio la vuelta al mundo al trascender en 1996 que el departamento que encabezaba Jaime Mayor Oreja repatrió a Malí a inmigrantes narcotizados.
Que el Gobierno es consciente de que estos procedimientos atentan contra la dignidad de los inmigrantes, lo demuestra la cantidad de medidas tomadas para ocultar o disimular estos procedimientos a los ojos del mundo.
En primer lugar se exige a los policías que las autoridades de los países de origen no vean el trato que da vuestro país a los inmigrantes expulsados.
La normativa lo expresa bien claro: «los repatriados no irán esposados ni serán expuestos a otros medios de coerción en el momento de ser entregados a las autoridades locales», y «la entrega de los repatriados se producirá fuera de la aeronave y en la medida de los posible se evitará que las autoridades locales suban a bordo del avión».
También reserva determinadas zonas en los aeropuertos españoles para que los aviones prestos a partir cargados de emigrantes se oculten a las miradas de algún curioso.
Se prohíben todo tipo de fotografías que puedan ser publicadas para denunciar al mundo el trato al inmigrante.
El texto del documento oficial es bien explícito:”En ningún caso estará justificado tomar fotografías mientras se está trabajando, especialmente en las salas de las terminales aéreas, jardineras (autobuses de traslado en pista), pistas e interior de los aviones”. La normativa prohíbe también a los funcionarios el uso de móviles durante estos operativos.
Aunque vuestro ministro Rubalcaba declaraba que lo ideal era un vuelo al día para la expulsión de inmigrantes, lo cierto es que durante el 2007 (año del reportaje de Amnistía Internacional) la frecuencia de vuelos para la expulsión masiva de inmigrantes era de tres o cuatro vuelos diarios.
En el informe, Amnistía Internacional, detalla el caso de un inmigrante que sufrió en sus carnes vuestros “humanitarios” métodos de transporte en las expulsiones de los “sin papeles”:
“El 9 de junio, el ciudadano nigeriano Osamuyia Akpitaye murió en el curso de un intento de expulsión. Según testigos, los dos agentes que lo acompañaban en el vuelo de Madrid a Lagos lo habían atado de pies y manos y amordazado, presuntamente con cinta adhesiva, para contrarrestar su resistencia a ser expulsado. Osamuyia Akpitaye murió al poco tiempo de despegar el avión. Una autopsia determinó que había muerto por asfixia.”
Las autoridades españolas llevaron a cabo numerosas operaciones de rescate para salvar a inmigrantes y solicitantes de asilo en peligro cuando intentaban llegar a Europa por mar. Sin embargo, se conculcaron los derechos de muchas de estas personas en el curso de su interceptación y en los centros de tramitación de carácter extraterritorial.
Amnistía Internacional denuncia: “Las condiciones de reclusión de las personas detenidas en tales centros y su derecho de acceso al procedimiento de concesión de asilo no se adecuaban a las normas internacionales.”
“El 30 de enero, el servicio de rescate marítimo español (Salvamento Marítimo), interceptó la embarcación Marine I con 369 personas a bordo. El pasaje, que se pensaba que provenía de Asia y del África subsahariana, se dirigía a las Islas Canarias. El servicio de rescate español ayudó a la embarcación a alcanzar una posición situada a 12 millas náuticas de la costa de Mauritania, donde permaneció casi dos semanas hasta que las autoridades mauritanas y españolas acordaron, el 12 de febrero, permitir que atracase en Mauritania. Como parte del acuerdo, las autoridades españolas tenían autorización para gestionar en Mauritania la prestación de asistencia y la tramitación del tránsito de los inmigrantes y solicitantes de asilo.
Las autoridades españolas aceptaron tramitar las solicitudes de asilo de 10 srilankeses que iban a bordo, que fueron trasladados a las Islas Canarias junto a otras 25 personas. Pero, a pesar del informe positivo elaborado por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), las solicitudes de asilo no fueron admitidas en virtud del procedimiento de asilo español y esas 10 personas fueron expulsadas el 25 de marzo.
Según informes recibidos en abril, de las 369 personas que iban a bordo del Marine I, 35 fueron devueltas a Guinea, 161 a India y 115 a Pakistán.
Al parecer, 23 continuaron detenidas en un hangar de Mauritania sujeto al control efectivo de las autoridades españolas en condiciones que no se ajustaban a la legislación española.
El 18 de mayo se trasladó a 17 de ellas a un centro de detención bajo jurisdicción mauritana y en junio fueron devueltas a Pakistán. Las otras 6 fueron trasladadas a Melilla, en España, para recibir tratamiento psicológico debido a su experiencia bajo custodia.”
El trato a los menores es otro ejemplo de insolidaridad:
“La reunificación familiar de los menores no acompañados no garantizaba que se tomara debidamente en cuenta el mejor interés del menor. Se expulsó a Marruecos a menores no acompañados sin garantías suficientes sobre su seguridad.”
Vuestra Ley de Extranjería también esta en entredicho:
“En noviembre, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucionales varias disposiciones de la Ley de Extranjería del 2000 que restringían el derecho de asociación de las personas inmigrantes y su acceso a educación básica y asistencia jurídica gratuita.”
Según Amnistía Internacional, continuáis torturando a los detenidos: “Los informes de tortura y otros malos tratos por agentes encargados de hacer cumplir la ley seguían estando extendidos en España.
Ni los organismos a los que pertenecían los agentes ni las autoridades judiciales investigaron tales casos con arreglo a las normas internacionales, lo que en la práctica dio lugar a situaciones de impunidad.”
“Durante las investigaciones sobre el caso de 22 personas detenidas en enero de 2006 por cargos relacionados con terrorismo, varias de ellas contaron al juez de instrucción que habían sufrido torturas y otros malos tratos a manos de agentes de la Guardia Civil mientras estaban recluidas en régimen de incomunicación.
Al final del año no se tenía conocimiento de que se hubiera realizado una investigación criminal sobre tales denuncias.”
“El 27 de abril, tres agentes de la Guardia Civil fueron declarados culpables de delitos relacionados con la muerte bajo custodia de Juan Martínez Galdeano en el Cuartel de la Guardia Civil de Roquetas de Mar, ocurrida el 24 de julio de 2005.
El oficial al mando, José Manuel Rivas, fue declarado culpable de un delito de atentado no grave contra la integridad moral del fallecido y una falta de lesiones, y condenado a 15 meses de cárcel, tres años de inhabilitación especial para empleo o cargo público y una multa. A otros dos agentes se los declaró culpables de lesiones con la agravante de abuso de superioridad y se les impuso una multa. Cinco agentes fueron absueltos. Tanto la acusación como la defensa presentaron recursos contra la sentencia.”
“El 19 de julio, un hombre de Ghana llamado Courage Washington resultó herido de gravedad en un incidente con disparos en el aeropuerto de Madrid-Barajas. Dos agentes de policía vestidos de civil se acercaron a él y le pidieron sus documentos de identidad. Courage Washington, que tenía problemas de salud mental, al parecer sacó una pistola de juguete del bolsillo y los agentes le dispararon cuatro veces.
Según testigos, algunos disparos se efectuaron cuando ya había caído al suelo.
Con posterioridad se abrió una investigación criminal contra Courage Washington por agresión a un agente de la autoridad. Su abogado había presentado una denuncia contra la policía.”
Otra denuncia de Amnistía Internacional contra España hace referencia al uso de armas de electrochoque:
“Varios organismos encargados de hacer cumplir la ley anunciaron que habían adquirido armas de electroshock Taser, y policías locales en al menos tres comunidades autónomas ya las estaban utilizando.
La normativa y las medidas de control relativas a la tenencia y el uso de tales armas por agentes encargados de hacer cumplir la ley eran insuficientes.”
Cabe decir que este tipo de armas pueden provocar la muerte por infarto en enfermos de corazón o en sujetos que están bajo el efecto de cierto tipo de drogas.
Una idea de la peligrosidad de las pistolas Taser nos lo da el hecho de que en los últimos cuatro años ya han muerto 16 personas en Canadá a causa de las descargas provocadas con su uso.
Debo insistir, una vez más, en que este comportamiento generalizado de asesinatos, torturas y violaciones que se da en TODOS los países del mundo por ideas políticas o religiosas es un comportamiento exclusivamente humano, es decir, es un comportamiento que siempre se ha dado en el animal humano y NUNCA en otro animal.
Digo esto porque estoy hasta las mismísimas gónadas de oír una vez tras otra a los monos domésticos emitir la expresión “ ¡ Que bestias ¡ ... o ¡ Que animales ¡ “ cada vez que leen, ven, o se enteran de alguno de estos comportamientos violentos propios del primate humano, NUNCA se os ocurrirá utilizar la expresión correcta … ¡¡ QUE HUMANOS ¡¡. Y nunca la utilizareis porque sois, como especie, un atajo de monos soberbios e ignorantes.
El reportaje de Amnistía Internacional pone, como cada año, los pelos de punta, especialmente cuando consideramos que es sólo la punta del iceberg de la violencia humana.
En el post de esta semana haré mención de las denuncias que Amnistía Internacional vierte sobre vuestro comportamiento en España en lo referente a lo que vosotros llamáis “derechos humanos”.
Acusa a vuestro país de que siguen siendo frecuentes las violaciones de los derechos humanos por los agentes de hacer cumplir la ley y que, además, actúan con toda impunidad.
En un primer apartado Amnistía Internacional denuncia al mundo el trato que reciben en España algunos de los inmigrantes que intentan buscarse una vida mejor en vuestro país.
Quien nos iba a decir que seríais capaces de tratar así a los inmigrantes, precisamente vosotros, que no hace muchos años abarrotabais muertos de hambre, trenes y trenes para invadir Francia, Alemania, etc., buscando campos en tiempo de vendimia en el país vecino o intentando encontrar un trabajo en cualquiera de las fábricas alemanas, cuando no, una plaza de camarero, de asistenta o de “aupair” en Inglaterra.
Ahora son otros los que llegan a vuestra patria para ser vuestros camareros, para ser vuestras sirvientas, para asistiros en vuestros hospitales y para limpiar el culo de los ancianos que tenéis en vuestras casas. Y encima, son los que os salvan vuestra Seguridad Social y os aseguran las pensiones de vuestra jubilación durante los próximos veinte años.
Dice textualmente el informe de Amnistía Internacional:
“A lo largo del 2007 se impidió el acceso a territorio español a personas inmigrantes y solicitantes de asilo, mediante procesos llevados a cabo en centros extraterritoriales en condiciones que no se ajustaban a las normas internacionales.
Se expulsó a menores no acompañados sin las debidas garantías para su seguridad.
Las inmigrantes víctimas de violencia en el ámbito familiar siguieron encontrando obstáculos para obtener protección, justicia y reparación, y tuvieron, además, dificultades de acceso a los recursos básicos.”
"En julio, el Ministerio del Interior dio a conocer un borrador de protocolo de actuación para la Policía Nacional y la Guardia Civil, relativo a medidas de seguridad en la repatriación y el traslado de detenidos, incluidos inmigrantes irregulares.
Este protocolo no reflejaba debidamente las normas europeas de derechos humanos pertinentes ni las recomendaciones de organizaciones internacionales sobre el uso de la fuerza y las técnicas de inmovilización por parte de los agentes encargados de hacer cumplir la ley durante las expulsiones".
Aunque el documento oficial de la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil indica que “el uso de medios coercitivos para reducir a los sin papeles no pueden poner en peligro su dignidad ni integridad física”, y que “El uso de estos procedimientos deberá ser proporcionado y con respeto a los derechos individuales de los repatriados” lo cierto es que el documento permite el uso de lazos de seguridad (en realidad bridas de plástico), cascos, prendas inmovilizadoras homologadas (en realidad “camisas de fuerza”), cinturones, esposas e incluso cinta reforzada, más conocida con el nombre comercial de “cinta americana”.
Cualquiera de vosotros se dará cuenta de que el uso de este material difícilmente respetará la dignidad del inmigrante que se devuelve a su país y dudo mucho que respete los derechos de los repatriados.
De hecho, como muy bien apunta Amnistía Internacional, tales medidas contravienen “la prohibición internacional de trato cruel, inhumano o degradante y causar asfixia u otros daños físicos graves a la persona expulsada.”
Por otra parte el documento oficial autoriza acciones violentas contra el detenido, las cuales (en el colmo del cinismo) recomienda que se lleven a cabo “lejos de la vista de niños y adolescentes”.
La normativa deja a criterio del responsable policial del vuelo “la posibilidad de mantener desorientados a los repatriados teniendo durante todo el viaje las «cortinillas cerradas» para evitar que los sin papeles intuyan adónde se dirigen”…. En fin, lo que tantas y tantas veces habéis visto en las películas de secuestros.
También, como a las victimas de secuestros, se mantiene la posibilidad de trasladarlos narcotizados “bajo prescripción médica”
Cabe esperar que no se vuelva a repetir la vergüenza nacional que dio la vuelta al mundo al trascender en 1996 que el departamento que encabezaba Jaime Mayor Oreja repatrió a Malí a inmigrantes narcotizados.
Que el Gobierno es consciente de que estos procedimientos atentan contra la dignidad de los inmigrantes, lo demuestra la cantidad de medidas tomadas para ocultar o disimular estos procedimientos a los ojos del mundo.
En primer lugar se exige a los policías que las autoridades de los países de origen no vean el trato que da vuestro país a los inmigrantes expulsados.
La normativa lo expresa bien claro: «los repatriados no irán esposados ni serán expuestos a otros medios de coerción en el momento de ser entregados a las autoridades locales», y «la entrega de los repatriados se producirá fuera de la aeronave y en la medida de los posible se evitará que las autoridades locales suban a bordo del avión».
También reserva determinadas zonas en los aeropuertos españoles para que los aviones prestos a partir cargados de emigrantes se oculten a las miradas de algún curioso.
Se prohíben todo tipo de fotografías que puedan ser publicadas para denunciar al mundo el trato al inmigrante.
El texto del documento oficial es bien explícito:”En ningún caso estará justificado tomar fotografías mientras se está trabajando, especialmente en las salas de las terminales aéreas, jardineras (autobuses de traslado en pista), pistas e interior de los aviones”. La normativa prohíbe también a los funcionarios el uso de móviles durante estos operativos.
Aunque vuestro ministro Rubalcaba declaraba que lo ideal era un vuelo al día para la expulsión de inmigrantes, lo cierto es que durante el 2007 (año del reportaje de Amnistía Internacional) la frecuencia de vuelos para la expulsión masiva de inmigrantes era de tres o cuatro vuelos diarios.
En el informe, Amnistía Internacional, detalla el caso de un inmigrante que sufrió en sus carnes vuestros “humanitarios” métodos de transporte en las expulsiones de los “sin papeles”:
“El 9 de junio, el ciudadano nigeriano Osamuyia Akpitaye murió en el curso de un intento de expulsión. Según testigos, los dos agentes que lo acompañaban en el vuelo de Madrid a Lagos lo habían atado de pies y manos y amordazado, presuntamente con cinta adhesiva, para contrarrestar su resistencia a ser expulsado. Osamuyia Akpitaye murió al poco tiempo de despegar el avión. Una autopsia determinó que había muerto por asfixia.”
Las autoridades españolas llevaron a cabo numerosas operaciones de rescate para salvar a inmigrantes y solicitantes de asilo en peligro cuando intentaban llegar a Europa por mar. Sin embargo, se conculcaron los derechos de muchas de estas personas en el curso de su interceptación y en los centros de tramitación de carácter extraterritorial.
Amnistía Internacional denuncia: “Las condiciones de reclusión de las personas detenidas en tales centros y su derecho de acceso al procedimiento de concesión de asilo no se adecuaban a las normas internacionales.”
“El 30 de enero, el servicio de rescate marítimo español (Salvamento Marítimo), interceptó la embarcación Marine I con 369 personas a bordo. El pasaje, que se pensaba que provenía de Asia y del África subsahariana, se dirigía a las Islas Canarias. El servicio de rescate español ayudó a la embarcación a alcanzar una posición situada a 12 millas náuticas de la costa de Mauritania, donde permaneció casi dos semanas hasta que las autoridades mauritanas y españolas acordaron, el 12 de febrero, permitir que atracase en Mauritania. Como parte del acuerdo, las autoridades españolas tenían autorización para gestionar en Mauritania la prestación de asistencia y la tramitación del tránsito de los inmigrantes y solicitantes de asilo.
Las autoridades españolas aceptaron tramitar las solicitudes de asilo de 10 srilankeses que iban a bordo, que fueron trasladados a las Islas Canarias junto a otras 25 personas. Pero, a pesar del informe positivo elaborado por el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), las solicitudes de asilo no fueron admitidas en virtud del procedimiento de asilo español y esas 10 personas fueron expulsadas el 25 de marzo.
Según informes recibidos en abril, de las 369 personas que iban a bordo del Marine I, 35 fueron devueltas a Guinea, 161 a India y 115 a Pakistán.
Al parecer, 23 continuaron detenidas en un hangar de Mauritania sujeto al control efectivo de las autoridades españolas en condiciones que no se ajustaban a la legislación española.
El 18 de mayo se trasladó a 17 de ellas a un centro de detención bajo jurisdicción mauritana y en junio fueron devueltas a Pakistán. Las otras 6 fueron trasladadas a Melilla, en España, para recibir tratamiento psicológico debido a su experiencia bajo custodia.”
El trato a los menores es otro ejemplo de insolidaridad:
“La reunificación familiar de los menores no acompañados no garantizaba que se tomara debidamente en cuenta el mejor interés del menor. Se expulsó a Marruecos a menores no acompañados sin garantías suficientes sobre su seguridad.”
Vuestra Ley de Extranjería también esta en entredicho:
“En noviembre, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucionales varias disposiciones de la Ley de Extranjería del 2000 que restringían el derecho de asociación de las personas inmigrantes y su acceso a educación básica y asistencia jurídica gratuita.”
Según Amnistía Internacional, continuáis torturando a los detenidos: “Los informes de tortura y otros malos tratos por agentes encargados de hacer cumplir la ley seguían estando extendidos en España.
Ni los organismos a los que pertenecían los agentes ni las autoridades judiciales investigaron tales casos con arreglo a las normas internacionales, lo que en la práctica dio lugar a situaciones de impunidad.”
“Durante las investigaciones sobre el caso de 22 personas detenidas en enero de 2006 por cargos relacionados con terrorismo, varias de ellas contaron al juez de instrucción que habían sufrido torturas y otros malos tratos a manos de agentes de la Guardia Civil mientras estaban recluidas en régimen de incomunicación.
Al final del año no se tenía conocimiento de que se hubiera realizado una investigación criminal sobre tales denuncias.”
“El 27 de abril, tres agentes de la Guardia Civil fueron declarados culpables de delitos relacionados con la muerte bajo custodia de Juan Martínez Galdeano en el Cuartel de la Guardia Civil de Roquetas de Mar, ocurrida el 24 de julio de 2005.
El oficial al mando, José Manuel Rivas, fue declarado culpable de un delito de atentado no grave contra la integridad moral del fallecido y una falta de lesiones, y condenado a 15 meses de cárcel, tres años de inhabilitación especial para empleo o cargo público y una multa. A otros dos agentes se los declaró culpables de lesiones con la agravante de abuso de superioridad y se les impuso una multa. Cinco agentes fueron absueltos. Tanto la acusación como la defensa presentaron recursos contra la sentencia.”
“El 19 de julio, un hombre de Ghana llamado Courage Washington resultó herido de gravedad en un incidente con disparos en el aeropuerto de Madrid-Barajas. Dos agentes de policía vestidos de civil se acercaron a él y le pidieron sus documentos de identidad. Courage Washington, que tenía problemas de salud mental, al parecer sacó una pistola de juguete del bolsillo y los agentes le dispararon cuatro veces.
Según testigos, algunos disparos se efectuaron cuando ya había caído al suelo.
Con posterioridad se abrió una investigación criminal contra Courage Washington por agresión a un agente de la autoridad. Su abogado había presentado una denuncia contra la policía.”
Otra denuncia de Amnistía Internacional contra España hace referencia al uso de armas de electrochoque:
“Varios organismos encargados de hacer cumplir la ley anunciaron que habían adquirido armas de electroshock Taser, y policías locales en al menos tres comunidades autónomas ya las estaban utilizando.
La normativa y las medidas de control relativas a la tenencia y el uso de tales armas por agentes encargados de hacer cumplir la ley eran insuficientes.”
Cabe decir que este tipo de armas pueden provocar la muerte por infarto en enfermos de corazón o en sujetos que están bajo el efecto de cierto tipo de drogas.
Una idea de la peligrosidad de las pistolas Taser nos lo da el hecho de que en los últimos cuatro años ya han muerto 16 personas en Canadá a causa de las descargas provocadas con su uso.
Otro tema que denuncia Amnistía Internacional es el trato que dais en vuestro país a la violencia de género:
“Dos años después de promulgarse la ley contra la violencia de género, las mujeres seguían encontrando obstáculos para obtener protección, justicia y reparación.
Algunos preceptos básicos de la ley todavía estaban en fase de desarrollo o se aplicaban con demasiada lentitud.
El número de mujeres muertas a manos de su pareja o ex pareja alcanzó la cifra de 71 en 2007. De ellas, 48 eran de nacionalidad extranjera.
Las mujeres inmigrantes continuaron especialmente expuestas a sufrir actos de violencia al seguir estando discriminadas en la legislación y en la práctica cuando intentaban acceder a la justicia y a recursos básicos como ayuda económica, tratamiento psicológico y acceso a centros de acogida”.
Mientras nosotros, los bonobos, nos respetamos y vivimos en armonía, vosotros os continuáis matando por ideas políticas.
Estáis tan descerebrados que matáis por razones ideológicas a personas que ni siquiera sabéis que ideas tienen.
Os limitáis a cargar un coche con gran cantidad de explosivos y hacerlo explotar en un aeropuerto o en una universidad, tanto os da, matáis a distancia y así os evitáis ver los rostros de vuestras victimas inocentes.
Tanto os da si matáis a unos ancianos, a un grupo de niños o a cualquier transeúnte. Lo que sí os importa, es que la bomba mate a cuantas más personas mejor. El éxito de vuestros atentados terroristas es directamente proporcional al número de cadáveres o de individuos mutilados que conseguís.
Afortunadamente en algunos casos falláis, ya que os descubren antes de la masacre o no os funciona el detonador, pero el intento fallido pregona vuestras intenciones asesinas.
El reportaje de Amnistía internacional para vuestro país en el 2007 os denuncia también en el apartado de terrorismo:
“Tras anunciar el fin del «alto el fuego permanente», ETA reanudó los atentados en España. El final del alto el fuego –roto en la práctica el 30 de diciembre de 2006 con la comisión de un atentado con bombas en el aeropuerto de Madrid-Barajas que causó la muerte de dos personas– se declaró oficialmente el 5 de junio de 2007.
El 24 de agosto, un coche bomba que explotó en el exterior del cuartel de la Guardia Civil en Durango, en el País Vasco, causó daños a propiedades pero ninguna víctima mortal.
El 9 de octubre, el guardaespaldas de un concejal vasco resultó herido en otro atentado con bomba.
El 1 de diciembre, dos agentes de la Guardia Civil que iban desarmados murieron como consecuencia de disparos efectuados por presuntos miembros de ETA en Capbreton, Francia. Se detuvo a un hombre y una mujer y se los acusó de asesinato; un tercer sospechoso logró escapar”.
“El 19 de diciembre, la Audiencia Nacional dictó sentencia en relación con el llamado «macro proceso 18/98», juicio en el que 47 personas fueron declaradas culpables de integración o colaboración con ETA en distintos grados como consecuencia de su trabajo en varias organizaciones nacionalistas vascas. En la sentencia se afirmaba que tales organizaciones formaban parte de ETA o seguían sus instrucciones. Al terminar el año seguían pendientes varios recursos contra la sentencia. Varios de los condenados habían declarado públicamente su oposición a ETA y al uso de la violencia con fines políticos”.
También os habéis visto involucrados en la vergüenza internacional del centro de torturas de Guantánamo. Habéis actuado mano a mano con los funcionarios de los Estados Unidos interrogando a prisioneros en Guantánamo y, además, habéis colaborado directamente con el gobierno de Bush en el traslado de prisioneros a Guantánamo al ceder vuestros aeropuertos para su transporte, con el beneplácito de ese pequeño hombrecillo llamado Aznar, el cual previamente, y sin vuestro consentimiento, os había llevado a una guerra en busca de unas imaginarias "armas de destrucción masiva":
“A principios de 2007 salieron a la luz denuncias relativas a la participación de la policía española en interrogatorios de detenidos entre 2002 y 2005 en el centro de detención estadounidense instalado en la bahía de Guantánamo. En respuesta a las preguntas de Amnistía Internacional, el Ministerio del Interior confirmó que se habían producido dos visitas de la policía española a Guantánamo, en julio de 2002 y en febrero de 2004.
Al menos 50 vuelos fletados por la CIA estadounidense con origen o destino en Guantánamo hicieron escala en territorio español o lo sobrevolaron entre 2002 y 2007, según la información aparecida en medios de comunicación que citaba datos del organismo español AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea). El último de estos vuelos de que se tuvo conocimiento se realizó en febrero de 2007. En algunos casos, los aviones aterrizaron en bases militares que también utilizaban las fuerzas estadounidenses. La información se entregó a la autoridad judicial que investigaba los presuntos vuelos de la CIA a través de España, relacionados con las entregas extraordinarias (transferencias ilegales de sospechosos entre países)”.
Al parecer, el gobierno tenía conocimiento de estos vuelos pero no lo mencionó al Parlamento español a pesar de que éste había solicitado toda la información disponible sobre este asunto en abril de 2006, ni tampoco al personal investigador del Consejo de Europa y el Parlamento Europeo.
Vuestra policía en España siguió violando los más elementales derechos humanos, según Amnistía Internacional, durante el 2007. En su informe correspondiente al 2007 denunció los malos tratos infligidos a detenidos bajo la legislación antiterrorista.
Amnistía Internacional ha puesto de relieve en multitud de ocasiones el hecho de la existencia de numerosos procesos judiciales pendientes, contra miembros de las fuerzas de seguridad acusados de torturas y malos tratos, con encapuchamientos, palizas, etc. Según ellos, en vuestro país, son también víctimas de palizas los presos comunes.
“Dos años después de promulgarse la ley contra la violencia de género, las mujeres seguían encontrando obstáculos para obtener protección, justicia y reparación.
Algunos preceptos básicos de la ley todavía estaban en fase de desarrollo o se aplicaban con demasiada lentitud.
El número de mujeres muertas a manos de su pareja o ex pareja alcanzó la cifra de 71 en 2007. De ellas, 48 eran de nacionalidad extranjera.
Las mujeres inmigrantes continuaron especialmente expuestas a sufrir actos de violencia al seguir estando discriminadas en la legislación y en la práctica cuando intentaban acceder a la justicia y a recursos básicos como ayuda económica, tratamiento psicológico y acceso a centros de acogida”.
Mientras nosotros, los bonobos, nos respetamos y vivimos en armonía, vosotros os continuáis matando por ideas políticas.
Estáis tan descerebrados que matáis por razones ideológicas a personas que ni siquiera sabéis que ideas tienen.
Os limitáis a cargar un coche con gran cantidad de explosivos y hacerlo explotar en un aeropuerto o en una universidad, tanto os da, matáis a distancia y así os evitáis ver los rostros de vuestras victimas inocentes.
Tanto os da si matáis a unos ancianos, a un grupo de niños o a cualquier transeúnte. Lo que sí os importa, es que la bomba mate a cuantas más personas mejor. El éxito de vuestros atentados terroristas es directamente proporcional al número de cadáveres o de individuos mutilados que conseguís.
Afortunadamente en algunos casos falláis, ya que os descubren antes de la masacre o no os funciona el detonador, pero el intento fallido pregona vuestras intenciones asesinas.
El reportaje de Amnistía internacional para vuestro país en el 2007 os denuncia también en el apartado de terrorismo:
“Tras anunciar el fin del «alto el fuego permanente», ETA reanudó los atentados en España. El final del alto el fuego –roto en la práctica el 30 de diciembre de 2006 con la comisión de un atentado con bombas en el aeropuerto de Madrid-Barajas que causó la muerte de dos personas– se declaró oficialmente el 5 de junio de 2007.
El 24 de agosto, un coche bomba que explotó en el exterior del cuartel de la Guardia Civil en Durango, en el País Vasco, causó daños a propiedades pero ninguna víctima mortal.
El 9 de octubre, el guardaespaldas de un concejal vasco resultó herido en otro atentado con bomba.
El 1 de diciembre, dos agentes de la Guardia Civil que iban desarmados murieron como consecuencia de disparos efectuados por presuntos miembros de ETA en Capbreton, Francia. Se detuvo a un hombre y una mujer y se los acusó de asesinato; un tercer sospechoso logró escapar”.
“El 19 de diciembre, la Audiencia Nacional dictó sentencia en relación con el llamado «macro proceso 18/98», juicio en el que 47 personas fueron declaradas culpables de integración o colaboración con ETA en distintos grados como consecuencia de su trabajo en varias organizaciones nacionalistas vascas. En la sentencia se afirmaba que tales organizaciones formaban parte de ETA o seguían sus instrucciones. Al terminar el año seguían pendientes varios recursos contra la sentencia. Varios de los condenados habían declarado públicamente su oposición a ETA y al uso de la violencia con fines políticos”.
También os habéis visto involucrados en la vergüenza internacional del centro de torturas de Guantánamo. Habéis actuado mano a mano con los funcionarios de los Estados Unidos interrogando a prisioneros en Guantánamo y, además, habéis colaborado directamente con el gobierno de Bush en el traslado de prisioneros a Guantánamo al ceder vuestros aeropuertos para su transporte, con el beneplácito de ese pequeño hombrecillo llamado Aznar, el cual previamente, y sin vuestro consentimiento, os había llevado a una guerra en busca de unas imaginarias "armas de destrucción masiva":
“A principios de 2007 salieron a la luz denuncias relativas a la participación de la policía española en interrogatorios de detenidos entre 2002 y 2005 en el centro de detención estadounidense instalado en la bahía de Guantánamo. En respuesta a las preguntas de Amnistía Internacional, el Ministerio del Interior confirmó que se habían producido dos visitas de la policía española a Guantánamo, en julio de 2002 y en febrero de 2004.
Al menos 50 vuelos fletados por la CIA estadounidense con origen o destino en Guantánamo hicieron escala en territorio español o lo sobrevolaron entre 2002 y 2007, según la información aparecida en medios de comunicación que citaba datos del organismo español AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea). El último de estos vuelos de que se tuvo conocimiento se realizó en febrero de 2007. En algunos casos, los aviones aterrizaron en bases militares que también utilizaban las fuerzas estadounidenses. La información se entregó a la autoridad judicial que investigaba los presuntos vuelos de la CIA a través de España, relacionados con las entregas extraordinarias (transferencias ilegales de sospechosos entre países)”.
Al parecer, el gobierno tenía conocimiento de estos vuelos pero no lo mencionó al Parlamento español a pesar de que éste había solicitado toda la información disponible sobre este asunto en abril de 2006, ni tampoco al personal investigador del Consejo de Europa y el Parlamento Europeo.
Vuestra policía en España siguió violando los más elementales derechos humanos, según Amnistía Internacional, durante el 2007. En su informe correspondiente al 2007 denunció los malos tratos infligidos a detenidos bajo la legislación antiterrorista.
Amnistía Internacional ha puesto de relieve en multitud de ocasiones el hecho de la existencia de numerosos procesos judiciales pendientes, contra miembros de las fuerzas de seguridad acusados de torturas y malos tratos, con encapuchamientos, palizas, etc. Según ellos, en vuestro país, son también víctimas de palizas los presos comunes.
Mientras preparaba el post de esta semana he podido leer en la prensa un caso más que viene a demostrar hasta que punto pueden ser crueles vuestros policías con los detenidos.
Cuatro mossos d'esquadra detuvieron a un rumano que fue confundido con un delincuente. La víctima se hallaba acompañado en aquel momento por su novia que estaba embarazada de dos meses. Los dos sufrieron un trato degradante y bochornoso. Para proceder a detenerlo los cuatro policías se abalanzaron sobre él y le propinaron "reiterados golpes y puñetazos por todo el cuerpo", según la sentencia. Los agentes, que no se identificaron, le pisaron la cabeza contra el asfalto y le agarraron por el cuello para impedir que gritase, al tiempo que le insultaban y le amenazaban de muerte. Eso suscitó la recriminación de los transeúntes. Practicaron la detención sin identificarse como policías, algo que sólo hizo uno de ellos cuando la "brutal actuación" fue recriminada por los peatones.
Después fue introducido en un coche patrulla para continuar ensañándose con él. Uno de ellos le introdujo su pistola en la boca, exigiéndole que reconociera un robo cometido días antes en un piso de Barcelona y le amenazó con tirarlo por un barranco. "Si la juez te suelta, te podemos matar. No serás el primero", le espetó al detenido, mientras le golpeaba con la pistola en la espalda. Durante el trayecto hacia la comisaría, los agentes también le golpearon e insultaron "repetida e indistintamente". El rumano no conocía el motivo de su arresto y temía que sus agresores fueran "delincuentes". El pobre hombre no paraba de llorar y rogaba que le dejasen de golpear porque era hemofílico y podía morir si le continuaban golpeando, aunque no le hicieron caso, incluso el conductor aprovechaba las paradas en los semáforos en rojo para darle puñetazos.
En la comisaría barcelonesa de Les Corts le pusieron unas esposas más apretadas y le siguieron golpeando, insultando y amenazando de muerte. Él insistió en que pararan pues podría morir dada su condición de hemofílico, pero siguieron los golpes mientras un mosso le replicaba, "Más te vale". Después fue desnudado, y acabó en el calabozo. Entonces, "y nunca antes", subraya la sentencia, se le leyeron sus derechos y los motivos de su detención.
Los agentes dejaron de pegarle cuando un agente no identificado que estaba de servicio en la comisaría les dijo a sus compañeros que pararan, porque había videocámaras.
Allí pasó la noche, y a las 11.30 del día siguiente fue puesto en libertad, al descubrirse el error, después de que la víctima del robo investigado no le reconociera en una serie de fotografías.
Pese a que los Mossos se percataron de que la detención se había producido por error y sin orden judicial, decidieron registrar la vivienda del pobre rumano en busca de algo que pudiera incriminarle. Así lo manifestó la compañera de piso de los denunciantes, que estuvo presente durante el registro.
A consecuencia de las agresiones, el detenido sufrió contusiones y hematomas en los brazos, lo que le obligó a ser hospitalizado durante dos días, a estar de baja durante 15 y a recibir un tratamiento intravenoso debido a su hemofilia.
Su novia embarazada (que también fue detenida) fue agarrada con fuerza por el pelo y le apretaron el cuello para que no gritara.
Para más recochineo, dos de los cinco mossos implicados fueron premiados con ascensos cuando ya estaban acusados de los malos tratos.
Por lo general, la violación de los derechos humanos sigue siendo la práctica habitual de los monos domésticos en gran parte del mundo.
Los acuerdos sobre los Derechos Humanos existen desde 1948.
Han pasado ya 60 años desde que se adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos por las Naciones Unidas. Han sido 60 años de fracasos en el trato a vuestros congéneres.
Lo triste es que, por desgracia, es lo que cabía esperar de vosotros, ya que vuestro comportamiento destructor y agresivo no ha variado desde que bajasteis del árbol.
Durante este periodo España ha sido denunciada en 105 ocasiones ante el Comité de Derechos Humanos de la ONU por supuestas violaciones del Pacto de Derechos Civiles y Políticos.
Para vergüenza vuestra, os comunico que vuestro país es el CUARTO DEL MUNDO en la triste lista de los países que cuentan con más dictámenes de violación del Pacto por detrás de Jamaica (100) Uruguay (45) y Australia (24).
Sin embargo es de justicia hacer constar que hay países que superan a todos los antes mencionados, me refiero a China, los países árabes, Estados Unidos, Rusia, Corea del Norte, Congo y la Cuba de Fidel.
La explicación está en que estos Estados la libertad de expresión está muy restringida y se dispone de poca información que pueda ser utilizada por el comité.
Por eso a los gobernantes de estos países (salvo EEUU) les sale urticaria cada vez que oyen la palabra Internet o televisión por satélite.
Revisando los acuerdos que firmasteis en 1948 leo:
“Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.
Sin embargo maridos y compañeros siguen matando a sus mujeres en todo el mundo. En la primera mitad de 2007 murieron en Egipto cerca de 250 mujeres a causa de la violencia ejercida por sus esposos o miembros de su familia, y una media de 2 mujeres era violada en el país cada hora.
Artículo 3:
”Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad de su persona”.
Pero lo cierto es que 1.252 personas en 24 países distintos fueron ejecutadas por sus respectivos Estados en 2007. Uno de ellos es el país que se considera el adalid del universo, el que se auto titula “Guardián de la justicia y de la paz mundial”, es decir, los Estados Unidos de América.
Artículo 5:
“Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes”.
Pero la realidad es que Amnistía Internacional documentó casos de tortura y otros tratos crueles, inhumanos y degradantes en más de 81 países en 2007.
Artículo 7:
“Todos son iguales ante la ley y tienen, sin distinción, derecho a igual protección de la ley”.
En el informe de Amnistía Internacional se examinan al menos 23 países que tienen leyes que discriminan a las mujeres, al menos 15 que tienen leyes que discriminan a los inmigrantes y al menos 14 que tienen leyes que discriminan a las minorías.
Artículo 9:
“Nadie podrá ser arbitrariamente detenido, preso ni desterrado”.
Al concluir 2007 había más de 600 personas detenidas sin cargos, juicio o revisión judicial de su detención en la base aérea estadounidense de Bagram, en Afganistán, y 25.000 permanecían retenidas por la Fuerza Multinacional en Irak.
Artículo 10:
“Toda persona tiene derecho, en condiciones de plena igualdad, a ser oída públicamente y con justicia por un tribunal independiente e imparcial”.
En el Informe 2008 de Amnistía Internacional se examinan 54 países en los que se celebraron juicios sin las debidas garantías procesales.
Artículo 11:
“Toda persona tiene derecho a que se presuma su inocencia mientras no se pruebe su culpabilidad, conforme a la ley”.
Las cifras de Amnistía Internacional muestran que en Guantánamo se ha recluido a alrededor de 800 personas desde que se abriera ese centro de detención en enero de 2002, y que en 2008 siguen allí recluidas 270 personas sin cargos o sin el debido proceso legal.
Artículo 13:
”Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado”.
En 2007 había más de 550 puestos de control y bloqueos del ejército israelí que restringían la circulación de la población palestina entre ciudades y pueblos de Cisjordania o se la impedía.
Artículo 18:
“Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión”.
Según ha documentado Amnistía Internacional, en 45 países había presos y presas de conciencia detenidos.
Artículo 19:
“Todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión y a investigar y recibir informaciones y opiniones, y a difundirlas, sin limitación de fronteras, por cualquier medio de expresión”.
De acuerdo con el Informe 2008 de Amnistía Internacional, en 77 países se restringía la libertad de expresión y de prensa.
Artículo 20:
“Toda persona tiene derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas”.
Se cree que miles de personas fueron detenidas durante la represión de las protestas en Myanmar en 2007; Amnistía Internacional cree que alrededor de 700 permanecen recluidas.
Artículo 23:
“Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a una remuneración equitativa y satisfactoria y a fundar sindicatos y a sindicarse”.
Al menos 39 sindicalistas fueron asesinados en Colombia en 2007; 22 han muerto en los primeros cuatro meses de este año.
Artículo 25:
”Toda persona tiene derecho a un nivel de vida adecuado para asegurar su salud y bienestar, en particular las madres y los niños y niñas”.
El 14% de la población malawiana vivía con VIH/sida en 2007, y solo un 3% tenía acceso a medicamentos gratuitos. Había 1 millón de niños y niñas huérfanos por muertes asociadas al VIH/sida.
(Todas las cifras están extraídas del Informe 2008 de Amnistía Internacional)
Así y todo, estas cifras minimizan la realidad, ya que la inmensa mayoría de los actos contra los derechos humanos no llegan a conocimiento de Amnistía Internacional para que puedan ser denunciados. Se sabe sin embargo que la tortura es práctica generalizada en 81 de los 138 países estudiados y práctica esporádica en los países restantes.
Varias de las condenas que le han caído a vuestro país lo son por no respetar la doble instancia penal, es decir, por no garantizar el derecho de todo condenado a la revisión de su condena por un tribunal superior.
En la 94 reunión del Comité, que se celebró en Ginebra los días 21 y 31 del mes pasado, España fue avergonzada ante los otros países.
Vuestro país se distingue negativamente entre las demás naciones por la gran variedad de conductas que para el Código Penal español constituyen delito de terrorismo. Se llega al caso de conductas que vuestra Ley considera de cariz terrorista y que en realidad no esta claro que lleguen a ser delito.
Se le recomienda a España que redefina el concepto de terrorismo de manera más restrictiva, a fin de que las medidas para luchar contra el terrorismo se ajusten a los derechos reconocidos en el pacto.
El Comité criticó también los abusos que cometéis con el famoso, por lo reiterativo, “secreto de sumario”, ya que viola el principio de igualdad de armas en el proceso.
También insistieron, una vez más, en que España no ha hecho lo suficiente para desterrar la tortura en las comisarías. Además se insiste en que en vuestro país abusáis de la incomunicación de los detenidos.
Uno de los miembros de Comité aseguró que 5.032 personas habían sido torturadas en España entre 2001 y 2007. La cifra es impresionante, pero más horrorizante es considerar que se trata únicamente de los casos que trascienden… ¡ Imaginad cual puede ser la realidad ¡
Y algo muy importante, también os emplazan a que España emprenda la abolición de la Ley de Amnistía de 1977 porque considera que supone una limitación gravísima de la investigación de crímenes contra la Humanidad en el ámbito nacional en lo que atañe a los crímenes cometidos por Franco y sus secuaces durante la cruel represión sobre vuestros colegas españoles.
Se le recuerda a España que los casos de genocidio y crímenes contra la humanidad NO PRESCRIBEN y que las leyes de punto final (como la española de amnistía de 1977, preconstitucional por otra parte) NO TIENEN NINGUNA VALIDEZ.
La Ley de Amnistía (el último triunfo del franquismo) impide que se repare la memoria de gente inocente que fue asesinada por Franco después de parodias de juicios sumarísimos. Recientemente al juez Garzón se le impidió, por culpa de esta Ley, la posibilidad de dar digna sepultura a los cuerpos de los asesinados que yacen amontonados en las innumerables fosas comunes de vuestras cunetas. En Valencia, por ejemplo, hay varias de ellas, una con más de 24.000 personas, de ellas 600 niños. Primero fueron encerrados en las improvisadas cárceles cedidas por la Iglesia católica (sus conventos e iglesias) y después llevados a fusilar. Su único pecado, ser hijos de “rojos”. Otros fueron secuestrados y entregados a familias franquistas (algo parecido hicieron los fascistas en Argentina).
En más de la mitad de los países de la Tierra se cometieron torturas o malos tratos a los prisioneros. Se llevaron a cabo matanzas masivas dentro del marco de guerras civiles o conflictos étnicos y nacionalistas (generalizados en Sudán, la URSS, China, Irak, Israel y Guatemala). Se distinguió en esta lista negra, el Gobierno surafricano por sus ejecuciones y por decenas de detenidos por motivos políticos, de los cuales muchos tenían menos de 18 años de edad. China, aplicó una dura represión sobre el movimiento estudiantil cuyo resultado fue de centenares de muertos y millares de detenidos. Los EE.UU. fueron denunciados, una vez más, por su continua aplicación de la pena de muerte, especialmente sobre ciudadanos de raza negra. La URSS fue puesta en evidencia por el gran número de encarcelamientos y muertes relacionadas con los movimientos étnicos en varias repúblicas. En el Congo han muerto en la última década más de cinco millones y medio de personas en guerras étnicas.
Israel siguió mostrándose brutal e inmisericorde contra las ocupadas Cisjordania y franja de Gaza, donde cientos de palestinos fueron asesinados y torturados por las fuerzas de ocupación israelíes. Alrededor de 500 presos políticos seguían pudriéndose en las cárceles marroquíes, algunos de ellos desde 1974. En sus comisarías y centros de detención se seguía torturando hasta la muerte a los presos políticos. Las detenciones preventivas fijadas en la ley en 6 o 12 días según el delito, pueden alargarse de manera indefinida. La legislación marroquí no establece diferencias entre el delito político y el delito común, puesto que (según el monarca alauita) "no deben considerarse como presos políticos aquellos que atentan contra Dios, contra la patria o contra el rey...". Es frecuente que en Marruecos se apliquen las torturas psicológicas a base de amenazar a los presos con matar o violar a familiares, oír como se tortura a otros, no dejar dormir al detenido, etc. Los "Escuadrones de la muerte" actuaron con total libertad en más de 35 países, donde las "desapariciones" constituyen una alternativa al asesinato.
Os sería más cómodo y tranquilizador para vuestras conciencias poder pensar que los "conquistadores" españoles, en América del Sur; los soldados y policías del General Pinochet, en Chile; los militares y policías de Videla en Argentina; los policías del General Franco, en España; los agentes de la Securitate de Ceaucescu, en Rumania; los soldados de los campos de concentración y de exterminio de Hitler, en Alemania; los soldados de los Gulags; los torturadores americanos de Guantánamo, etc., eran seres anormales y perversos, pero la realidad es que la casi totalidad de ellos pasaron por ser seres completamente normales que no fueron procesados al terminar los regímenes militares en los que actuaron. La casi totalidad de ellos se acogió al acomodaticio artículo de los códigos militares que nos habla de la "Obediencia debida". De esta manera pretendían justificar su propia violencia frente a la sociedad.
A todos ellos hay que añadir a los asesinos islamitas y a los católicos torturadores y asesinos de la Inquisición, en estos casos se escudan o escudaron en la “santa” lucha contra el infiel.
Seguid añadiendo a la macabra lista a los terroristas, a los violadores, a los pederastas, a los que torturan y matan a sus mujeres, etc., etc., etc. Todos ellos encontraran justificación para sus actos.
Y es que vuestra maldad de monos domésticos la lleváis implantada en vuestros genes. No importa de donde vengáis o donde viváis, sois malvados, asesinos y perversos por naturaleza, en una palabra… SOIS HUMANOS ¡¡.